“Me vine del centro hace 5 años para vivir en un lugar tranquilo con mi familia y me vuelven a asaltar. Es la segunda vez que me pasa lo mismo en dos años y ahora sin dudas la única solución que veo es vender todo e irme de acá”. Eso dijo ayer resignado José Antonio Morilla, un comerciante de 59 años, quien la noche del jueves fue víctima junto a su mujer de al menos cuatro delincuentes armados que los sorprendieron mientras cenaban en su casa de Colonia Richet Zapata, en Santa Lucía.
Los delincuentes encañonaron a la pareja, los tiraron al piso y cargaron en el auto familiar un televisor LCD de 32 pulgadas, dos celulares, una notebook, un reproductor de DVD y 600 pesos, precisó Morilla. Más tarde, la Policía encontró el vehículo sin el botín en un barrio de Rivadavia.
Eran las 22 del jueves cuando Morilla y su esposa cenaban en su casa de la calle San Juan. En ese momento, los perros de la pareja comenzaron a ladrar y el hombre fue a revisar porque estaban inquietos los animales: ‘salí al patio y a un costado de la casa estaban parados cuatro tipos. Me dijeron ‘quedate quieto o te quemamos’ y ni mi mujer ni yo pudimos verles los rostros, sólo alcanzamos a ver que todos estaban armados’, dijo el comerciante.
Luego de encerrar a la pareja en una habitación, los malvivientes huyeron con los aparatos en el Chevrolet Astra de la familia, señalaron las fuentes.
Tras el golpe, el auto fue localizado alrededor de las 23.30 por efectivos de la Brigada de Investigaciones y del Comando Radioeléctrico en calle Dorrego, frente a la iglesia del barrio Aramburu, en Rivadavia, informaron fuentes policiales.
