Un joven obrero de finca fue víctima de un violento asalto cuando se dirigía en bicicleta al trabajo. Según su relato, dos delincuentes que andaban en un auto lo abordaron, lo amenazaron y le gatillaron con un arma de fuego, lo lastimaron con un cuchillo y finalmente lo tiraron a un desagüe, ensañados porque no llevaba celular, billetera ni nada de valor para sustraerle.
El ataque ocurrió en la mañana de este lunes, en 25 de Mayo. La víctima fue un muchacho de 23 años llamado José María Correa, que vive sobre calle La Plata, cerca del cruce con calle 4. A eso de las 7.30 salió en su bicicleta rumbo a la finca donde trabaja, situada en La Plata y 5. Pero no llegó, pues en ese trayecto fue abordado por los dos delincuentes que se trasladaban en un auto VW Gol color oscuro, o en un modelo similar.
Según Correa, los ladrones le cruzaron la bicicleta, descendieron del auto y de entrada le demostraron sus intenciones, pues uno sacó un arma de fuego y le apuntó a su cabeza, mientras que el otro portaba un arma blanca tipo navaja. "Me pedían la billetera y el celular, pero no llevaba nada. Yo les decía eso pero estaban muy enojados", dijo a este diario el joven trabajador.
Los asaltantes se ensañaron por no poder sacarle nada. En ese momento, según la denuncia, el que tenía el arma de fuego le gatilló. Mientras que el otro "me empezó a largar puñaladas". "Yo me protegía con los brazos, más no podía hacer", agregó.
El ataque cesó con una certera patada que le dio en el pecho uno de los ladrones. Correa no pudo mantenerse en pie, se fue para atrás y cayó al desagüe, que estaba vacío. En ese lugar esperó que los delincuentes se fueran y luego empezó a caminar por el interior del mismo desagüe hasta llegar a la casa de una hermana que vive cerca. Allí lo auxiliaron y llamaron a la Policía, mientras que un tío lo llevó en su auto hasta el hospital departamental.
El muchacho sufrió cortes, principalmente en su brazo derecho, y también una lesión en el hombro que en los próximos días tiene que hacerse ver. "No sabía qué hacer, cuando vi el arma dije ‘aquí me matan’. Yo no tengo problemas con nadie, me quisieron robar", expresó.
La denuncia fue radicada en la seccional 10ma, desde donde abrieron una investigación para dar con los autores. La víctima cree que "no son de acá, por la pinta y por cómo hablaban".