Federico Gonzalo Marinero fue sorprendido con un celular que había robado minutos antes y fue condenado a un año de prisión efectiva, más la unificación con una pena anterior, deberá cumplir dos años en el Servicio Penitenciario Provincial.

El hecho ocurrió el viernes, alrededor de las 22.30, en inmediaciones de Hipólito Yrigoyen y callejón Los Mandarinos, en Pocito. La víctima caminaba por la vereda cuando dos sujetos pasaron cerca de ella y le arrebataron el celular.

Justo pasaba por allí un patrullero y la mujer les avisó sobre el robo, saliendo en su búsqueda. Por fortuna, uno de ellos fue aprehendido y le encontraron en sus prendas el teléfono que había sustraído. Quedó detenido y condenado.