Buenos Aires, 18 de junio.- Los médicos legales que revisaron al imputado por el crimen de Ángeles Rawson estimaron que algunas lesiones que presentaba en su cuerpo pueden haber sido provocadas por la víctima al tratar de evitar que la matara y que otras pudieron ser autoinfligidas para esconder esa evidencia.

La Procuración General de la Nación informó en un comunicado que la revisación fue efectuada “con motivo de las lesiones que denunció (Jorge) Mangeri, vinculadas a supuestos apremios ilegales y a la privación ilegítima de la libertad que dijo haber sufrido horas antes de su concurrencia a la fiscalía”.

Añadió que por tal motivo “fueron convocados por orden de la fiscal (María Paula) Asaro médicos de la División Medicina Legal de la Policía Federal, quienes determinaron la existencia de dos tipos de lesiones en su cuerpo”.

“Los médicos que revisaron a Mangeri refirieron -continuó- que las lesiones que dijo haber sufrido antes de su detención por supuestos apremios ilegales, se corresponden en realidad con heridas que podrían haber sido realizadas por la víctima durante su defensa de un ataque”.

Los profesionales citaron que “se presentaban lesiones autoproducidas, posiblemente para enmascarar aquellas que habría sufrido inicialmente con motivo del ataque”, según el comunicado oficial.

“La fiscal evaluó -de acuerdo con el dictamen médico- que las lesiones que denunció el imputado como originadas en apremios ilegales se corresponden en realidad con la defensa de la víctima frente al ataque y con el intento posterior de borrar esas huellas en su cuerpo por parte del imputado”, concluyó.