En silencio. Guadalupe Andrada (30) se negó ayer a dar su versión de cómo fue que mató a su pareja Juan Pablo Ojeda. Hoy, continúa el juicio.

 

Calificación del hecho: homicidio agravado por el vínculo. Pena posible: prisión o reclusión perpetua. Esa dura acusación pesa contra Guadalupe Rita Andrada Espinosa (30) por haber dado muerte de un cuchillazo en el abdomen a su pareja Juan Pablo "Yeyé" Ojeda Rivero (26), en los primeros minutos del 10 de julio de 2017 en la casa donde vivían con tres de los cinco hijos de la acusada con otras parejas, en el Loteo Reconquista, Chimbas.

Durante la investigación, Andrada intentó sin éxito instalar la idea de que ella lo mató en defensa propia cuando discutían y el joven intentó sacarla fuera de la casa. Según ese primer relato, era él quien tenía el cuchillo y ella quien se lo quitó hasta propinarle un puntazo, sin saber cómo, en medio de la pelea.

Ayer, en la primera audiencia del juicio en su contra, tenía la oportunidad de repetir esa versión ante los jueces Juan Carlos Caballero Vidal (h), Raúl José Iglesias y Silvia Peña Sansó de Ruiz (Sala I, Cámara Penal) pero por consejo de su defensora, María Noriega, optó por el silencio.

Y enseguida el tribunal dio paso a los testigos con los que la defensa y la Fiscalía dirigida por Marcela Torres, intentarán sostener sus argumentos.

De entrada un policía pareció complicar a la acusada al decir que cuando llegó, apenas ocurrido el homicidio, la mujer le confesó que ella había matado a su pareja en medio de una discusión. También declaró una hermana de la víctima, la médica forense que analizó el cadáver y también la de la Policía.

El crimen de Ojeda ocurrió en medio de una situación conflictiva que había comenzado alrededor de un año y medio antes del crimen. Y que incluyó cuatro meses de convivencia de continuos cruces, que terminaron con uno de los dos muerto.