Un hombre de 51 años admitió ayer que está dispuesto a cumplir 8 años de cárcel por los distintos abusos sexuales contra su sobrina (entre los 8 y los 12 años), quien lo consideraba como su padre, pues desde muy pequeña (a los 3 años) había ido a parar a su hogar porque su mamá no podía criarla a causa de una grave enfermedad mental, dijeron fuentes judiciales. Defendido por César Jofré, el imputado acordó con la fiscal Marcela Torres cumplir una pena de 8 años de cárcel por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por su condición de guardador, dijeron fuentes judiciales.
Entre las maniobras denunciadas, se incluyen manoseos, besos y hasta la introducción de dedos en los genitales de la entonces menor. Y los informes psicológicos practicados a esa víctima (hoy ya una joven) terminaron por confirmar que no mentía, precisaron los voceros.
Los hechos habían sido denunciados en 2015, pero el ahora confeso abusador fue detenido recién el 20 de mayo de 2020.
Será el juez Miguel Dávila Saffe (Sala I, Cámara Penal) quien deberá decidir si acepta o no la propuesta de juicio abreviado para terminar con el proceso judicial. Si lo hace, no podrá aplicar una pena mayor a la acordada por las partes.