Juan Carlos Caballero Vidal (h), juez de la Sala I de la Cámara Penal, absolvió ayer por el beneficio de la duda a un ‘masajista’ de 48 años sobre el que pesaba una acusación grave: haber atraído con un aviso clasificado gratuito a una exvecina hasta su casa en la pocitana Villa Paolini, con la excusa de ofrecerle un trabajo como promotora, sedarla con un té y pastillas y violarla, dijeron fuentes judiciales. El hecho ocurrió en la siesta del 10 de enero del año pasado y esa misma tarde ese sospechoso, Juan Carlos Avila, fue detenido. Ayer, tras 19 meses de estar preso en la cárcel, quedó en libertad.

La semana pasada, durante los alegatos del juicio, el fiscal Gustavo Manini consideró que los dichos de la chica, por entonces de 14 años, los de otros testigos y las pericias complicaban a Avila. Y por eso le pidió al magistrado que condenara al acusado a 7 años de cárcel. La jovencita había dicho que Avila le prometió un celular además del pago, que fuera sola y que no le comentara del asunto a su mamá.

En cambio, los defensores Leonardo Villalba y Javier Alonso, pidieron la absolución. Argumentaron que no había ninguna revista secuestrada para probar lo del aviso; que las lesiones detectadas por el médico en la denunciante eran de antigua data. Y sostuvieron el relato de su cliente, quien admitió conocer a la niña porque su familia vivió también en la misma villa de Pocito, y aseguró que ella le dijo tener 18 años, pero negó haber mantenido sexo con ella.

La sentencia no está firme. Ahora el fiscal y la querella pueden pedir a la Corte revisar el fallo.