Los vecinos de Antonio Muñoz (70), el jubilado asesinado esta mañana en Pocito, dijeron a este diario que el hombre llevaba una vida tranquila, sin sobresaltos. “No tenía problemas con nadie”, sostuvo una vecina que se arrimó a ver el trabajo de la Policía en la escena del crimen. “Era un pan de Dios”, afirmó otra.
La víctima vivía en el 196 Oeste de la calle Salvador María del Carril, entre Libertad y Rosas, en la Villa Paolini, Pocito. Sobre el mediodía de este lunes un sobrino que fue a buscarlo lo encontró muerto en la casa. Estaba tendido en el suelo y rodeado por un charco de sangre. En la Policía indicaron que se encuentran investigando la hipótesis de un crimen en ocasión de robo, pero no descartan nada.
Muñoz se dedicaba a la compra-venta de autos y recientemente había realizado una operación, según dijeron familiares a este diario.
Se llamaba Antonio. Algunos le decían "Toni" o "Manolo". Detrás de su casa tenía departamentos que alquilaba. Otra de las versiones que circulaba entre los vecinos era que tenía problemas con uno de los inquilinos, pero esa hipótesis no fue confirmada por fuentes policiales.
La víctima tenía 70 años pero se mantenía activa. “Acá venía a comprar siempre pero hacía mucho que no venía. Tenía muchos autos para vender, algunos nuevos. Él andaba en una Fiorino, siempre se lo veía activo”, describió un comerciante de la villa.
Los investigadores continúan trabajando para determinar en qué circunstancias ocurrió el crimen y para dar con el o los autores del hecho.