"Que nadie pase la cena de Navidad con su abusador", posteó la niña, hoy de 13 años, en su cuenta de Facebook. Y ayer un tribunal, sin conocer esa publicación, coincidió con su ruego: declaró culpable a "su abusador", su padrastro desocupado de 42 años, y otra vez ordenó meterlo preso preventivamente, hasta que la sentencia en su contra quede firme. Hoy, esos mismos jueces, Celia Maldonado, Matías Parrón y Andrés Abelín Cottonaro, resolverán el punto más importante para ese sujeto, pues decidirán si le aplican 18 años de cárcel como lo pidieron el fiscal de la UFI ANIVI Roberto Mallea, la ayudante fiscal Andrea Insegna y los abogados de la familia de la víctima, José Luis Guidet Montilla y Nicolás Gómez Camozzi.

Ayer, los jueces adhirieron a su planteo de considerar los ataques sexuales sufridos por la niña entre los 8 y los 12 años, como abusos sexuales gravemente ultrajantes, agravados por la situación de convivencia en perjuicio de una menor de 18 años.

Quien podrá reclamar por el fallo será el defensor Gastón Garrido, quien pidió la absolución de su cliente o, en todo caso, una condena por abuso sexual simple.

"Se trató de una serie de malos entendidos… amo a mi esposa y a mis tres hijos", dijo el acusado al tribunal, ante el cual negó los delitos que le atribuyen.

"Estoy conforme con la sentencia, pero el daño que le causó a mi hija no se va a solucionar ni con 8, ni con 10 ni con 20 años, eso es para toda la vida", dijo al borde de las lágrimas la madre de esa niña.

Según la mujer, ella conoció los padecimientos de su hija a eso de las 10 de la mañana del 26 de mayo pasado. Ese día la menor le contó que su padrastro la había destapado durante la madrugada y le había pasado la lengua, además de sacarle fotos.

Entonces ella lo increpó, pero él negó todo y dijo que se había levantado a taparla a ella y a su hermanito, y admitió que les sacó fotos pero la mujer no pudo hallar ninguna imagen en su celular. Ese día lo corrió de la casa y le dijo que lo iba a denunciar: "Yo no hice nada", dijo él. Y antes de partir a Mendoza le puso una mano en la espalda a su hijastra y se despidió: "Chau hija, perdón".

Cinco días después se entregó con un abogado y pasó 2 meses preso en una seccional y otros dos con prisión domiciliaria. Llegó libre a juicio, pero ayer volvió a una comisaría y todo indica que, desde allí, pasará al Penal de Chimbas.

 

Jornalero a juicio por doble abuso

El juez de Garantías Federico Rodríguez rechazó ayer por "improcedente" el pedido de sobreseimiento que la abogada Carla Manini efectuó a favor de su cliente, un obrero de 20 años preso desde junio pasado. Y así, dio luz verde al pedido de la fiscal coordinadora de la UFI ANIVI Valentina Bucciarelli y el ayudante fiscal Nahuel Ibazeta, para que se eleve a juicio la causa contra ese sujeto, a quien se lo acusa de cometer cuatro graves ultrajes sexuales contra su hijastra de 10 años y al menos un abuso sexual simple contra la hermana de esa niña, de 11 años. En el próximo juicio, Fiscalía buscará que el jornalero reciba 18 años de cárcel.