Una joven pareja denunció ayer que, en su ausencia, perdieron todo lo que tenían en su rancho por un incendio. Y ligaron ese episodio directamente con una pelea que tuvo el dueño de casa con otros vecinos, dijeron fuentes policiales.
El hecho ocurrió alrededor de las 6 de ayer en el lote 29 del sector III del Asentamiento Pedro Echagüe, en Santa Lucía, donde hasta hace unos días vivían Eduardo Pereyra (23) con Elizabeth Montero (22) y su pequeño hijo.
Fue una vecina la que llamó a la Policía para pedir ayuda, porque luego de escuchar una explosión y salir a ver, se topó con las llamas en el rancho contiguo al suyo. En el acto se puso a tirar la poca agua que tenía (en gran parte del sector III no tienen suministro de agua potable) para mojar sus paredes y su techo y así evitar que se le pasara a su casa.
Fueron los bomberos voluntarios de Santa Lucía, quienes terminaron de controlar el siniestro, pero para entonces el daño estaba hecho: dos camas, una heladera, dos mesas, sillas y otros muebles fueron destruidos por el fuego, igual que todo el rancho, con techo de cañas y palos.
Los damnificados manifestaron que el martes pasado habían sufrido un robo. Y no dudaron en atribuir ese episodio y el incendio de ayer con una pelea que tuvo Pereyra al menos con dos sujetos más. En esa trifulca, según la denuncia, habían amenazado con quemarle la casa.

