’Acá quisieron tapar todo y por eso informaron que mi sobrina se atravesó. Eso es mentira. La verdad es que ese policía, el oficial Emanuel Fuentes, se distrajo porque llevaba a su hijo pequeño en el asiento de adelante y quiso cerrarle la ventanilla. Lo digo porque tenemos testigos’, dijo ayer Luis Balderramo, molesto. ‘Es más, por esa imprudencia podríamos haber lamentado la pérdida de dos vidas, porque mi sobrina iba montada en la parte de atrás de la bicicleta en la que la llevaba su hermano de 13 años, que gracias a Dios luego del choque salió despedido para el lado de la vereda. En cambio ella, no, cayó sobre el auto y la calle. Murió por el golpe en la cabeza’, precisó Balderramo.
Según la familia de la chica, luego del choque el policía habría dicho: ‘y que querés que haga, no ves que se podía tirar mi hijo por la ventana‘.
Esa chica era Rocío Córdoba, tenía 17 años, era la segunda de tres hermanos y vivía con sus papás empleados públicos en el barrio Del Carmen, en Capital.
Fue atropellada con su hermano el pasado jueves cerca de las 19 en el Lateral Norte de Circunvalación, metros al Oeste de Matías Zavalla, muy cerca de su casa. Esa tarde, los hermanos habían salido a dar una vuelta en bicicleta, cuando fueron atropellados desde atrás por Fuentes a bordo de un Fiat Punto.
Desde entonces quedó internada con un pronóstico grave, hasta que falleció a las 8 del lunes.
La familia de la chica también estaba molesta porque -dijeron- en el hospital les dijeron que murió, luego que no y finalmente que sí. Y por una larga espera en la morgue judicial. A través del abogado Leonardo Miranda, se harán parte querellante.
