Lo que mostró en París es extraordinario. Tanto, que si le faltaba algo para que el mundo del ciclismo se rinda a sus pies, era eso y lo logró. El ciclista belga Remco Evenepoel dejó una marca en estos Juegos Olímpicos que se disputan en la “ciudad del amor”: con dos medallas de oro se convirtió en el primer hombre en la historia olímpica en lograr esta combinación de medallas de oro en la misma edición de los Juegos Olímpicos.. Y mientras el mundo habla de él, pocos saben de la huella que dejó en San Juan, provincia que según contó Remco, “siempre guardará en su corazón” por haber conseguido aquí el primer logro cuando su carrera deportiva comenzaba.

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Remco Evenepoel hizo historia en el ciclismo de los Juegos Olímpicos de París 2024 tras ganar dos medallas de oro.

San Juan fue para Remco Evenepoel su trampolín al profesionalismo. En tierras sanjuaninas debutó como ciclista profesional con apenas 18 años (cumplió los 19 concentrado aquí) y un año después logró su primer triunfo profesional ganando la 38va Vuelta Internacional a San Juan en los primeros días del año 2020. Con apenas 20 años, el “chico maravilla” se consagró en una avenida de Circunvalación colmada con 200 mil personas. “Estoy muy contento por haber conseguido este gran logro. El año pasado empecé mi carrera profesional aquí, por eso la Vuelta a San Juan siempre será especial y ahora mucho más porque fue aquí donde pude alzarme con mi primera Vuelta de esta categoría”, abrió la charla el belga en una entrevista con DIARIO DE CUYO el día después de su consagración.

Carismático y cordial, Remco rememoró en ese momento su niñez como futbolista siendo convocado en las juveniles para representar a la Selección de Bélgica pero años después y ya de 16 años decidió colgar los botines y subirse a la bici. Apenas dos años después llegó a San Juan con el Deceuninck Quick Step y debutó como profesional consagrándose en la General de Sub-23. Al año siguiente volvió y se consagró en la categoría mayor un día después de cumplir sus 20 años.

Ese lunes del año 2020 en horas del mediodía, el ciclista le contó a este medio del futuro que soñaba pero seguramente en su cabeza estaba lejos de imaginarse lo que consiguió los años posteriores y que coronó en París recientemente: medalla de oro en la contrarreloj y también medalla dorada en la prueba de pelotón, algo que nadie había podido lograr en unos Juegos Olímpicos en toda la historia. Y en la prueba de pelotón disputada el sábado, Remco Evenepoel se impuso con un tiempo de 6 horas, 19 minutos y 34 segundos, para completar los 272 kilómetros de exigencia. Su potencial lo demostró de principio a fin en las calles de París, tanto que sufrió una pinchadura a pocos kilómetros del final pero la ventaja que le había sacado al pelotón le dio tiempo de cambiar la bici, seguir en competencia y consagrarse bicampeón de los Juegos.

Más allá de este doblete histórico en el evento más relevante del mundo, ya tiene en su historial la cosecha de otros dos títulos mundiales (Wollongong 2022 en ruta y Glasgow 2023 en la prueba contrarreloj) y varios más en su carrera como juvenil. Sus inicios en el ciclismo fueron ya de grande y San Juan fue la provincia que lo vio nacer en la disciplina.

En la “capital mundial del ciclismo” Remco dio sus primeros pasos. San Juan lo cobijó, su carisma y su enorme sonrisa lo puso entre los europeos más queridos. En una Circunvalación atestada de público, el belga se sintió querido y así lo graficó: “Lo del público es maravilloso. Me parece increíble que haya esa multitud pero sobre todo tanta pasión, en Europa no se da mucho ese aliento como pasa acá, me conmovió ver tanta gente en la autopista. En cada giro veía más y más gente, por ahí se tornaba peligroso porque la gente estaba muy cerca nuestro, pero por suerte no hubo caídas; es maravilloso el ciclismo aquí”, comentó.

“Estoy muy contento de que me amen tanto en un lugar tan lindo, pero soy consciente que como ciclista mi carrera recién comienza, tengo que mantener los pies sobre la tierra”, expresó Remco en aquella entrevista sin saber que cuatro años después marcaría un hito histórico en unos Juegos Olímpicos en París, muy lejos de San Juan la provincia que fue cuna en su carrera deportiva.