La novela del invierno parece estar llegando a su fin. Tras llegar a un nuevo acuerdo con San Lorenzo, River comprará a Adam Bareiro y se sumará al equipo de Martín Demichelis. La extensa negociación se destrabó este miércoles por la noche y el paraguayo se pondrá la camiseta del Millonario.
Luego de varias idas y vueltas entre los clubes, con San Lorenzo rechazando ofertas de River que en un primer lugar les había dado el visto bueno, las conversaciones llegaron a buen puerto anoche en una reunión de última hora. Adam Bareiro se pondrá la banda roja para este segundo semestre del año. Firmará contrato hasta diciembre del 2027.
El delantero paraguayo de 27 años, que tenía intenciones de salir del Ciclón, llega al Millonario a cambio de un pago de 2.5 millones de dólares al momento de la firma, más dos millones a abonar en 10 cuotas de 200 mil. Finalmente, el conjunto de Núñez no ejecutará la cláusula de rescisión de su contrato, que era de 3.5, sino que la superará por un millón de dólares netos.
Este jueves, en San Lorenzo lo esperaban para que volviera a los entrenamientos luego de disputar la Copa América con Paraguay. Sin embargo, el delantero no se presentó y el motivo sería el acuerdo entre clubes por su traspaso. Finalmente los Gauchos de Boedo realizaron un comunicado en sus canales de comunicación oficial donde confirman la transacción y que el Millonario abonará U$D 4.5M netos por el pase del artillero.
Qué se lleva River con Bareiro
Entre lo mejor de su paso por el Ciclón se destacan primero, claro, los 40 goles en 120 partidos. Es, como casi todo delantero paraguayo, un muy buen cabeceador en defensa y en ataque. Y por su fortaleza y entrega es un rival incomodísimo para cualquier central, que se banca jugar como único referente de ataque o con otro 9 porque no es un negado con la pelota.
Entre las contras está la enorme cantidad de tarjetas amarillas que recibe por ir a buscar algunas pelotas de forma temeraria o a destiempo, pero no entiende otra manera de jugar. Es así, deja todo, con lo bueno y con lo malo que eso a veces implica.
Por último, es de esos goleadores muy racheros. En el Ciclón tuvo tiempos de sequía importantísimos -llegó a estar 15 partidos sin convertir- y momentos donde hacía goles de todos los fines de semana. Ahora, Bareiro competirá por un lugar con Miguel Borja.