En el Estadio SoFi de California se bajó el telón de la primera fecha de la fase de grupos de la Copa América Estados Unidos 2024 con un impactante resultado. Costa Rica logró un histórico empate 0-0 ante la Brasil de Vinicius Jr, una de las principales aspirantes a quedarse con el título continental.
Una vez finalizado el compromiso, el director técnico argentino de los Ticos, Gustavo Alfaro, brindó una conferencia de prensa en la que explicó la importancia del factor de las medidas del campo de juego, develó qué fue lo que les dijo a sus dirigidos en el entretiempo y comparó a su seleccionado con una reconocida película de Hollywood.
Al res consultado sobre si la manera de jugar esta noche de los centroamericanos se debió a que enfrente estaban los cinco veces campeones del mundo, el ex entrenador de Boca Juniors lanzó una inesperada reflexión que rápidamente se convirtió en viral: “Yo digo que nosotros éramos Bruce Willis en Sexto Sentido. El único que no sabía que estaba muerto era él. Antes de empezar la película, a nosotros ya todos nos daban por muerto. Pero bueno, es así. Yo digo que lo importante de todo esto es dar respuestas a las complejidades que tiene el rival”. Prosiguiendo con su análisis, agregó: “Ahora vamos a enfrentar a un jugador como Luis Díaz, de los mejores extremos del mundo. Es un jugador que desequilibra, pero Luis Díaz también juega en función de Arias, juega en función de James Rodríguez. Juega en función de una estructura que trabaja”.
Con el empate entre Costa Rica y Brasil, el líder del Grupo D tras finalizar la primera jornada es justamente Colombia, que en su debut se impuso por 2 a 1 ante Paraguay gracias a los tantos de Daniel Muñoz y Jefferson Lerma (Julio Enciso descontó en el complemento).
“Cuando vinimos el otro día a la conferencia de prensa me tomé la precaución, más allá de que se habían publicado las dimensiones que iba a tener el campo de juego, le pedí en un momento al chofer que nos llevaba después de la conferencia de prensa si me podía parar en la cancha porque quería ver el estado de la grama, de cómo se encontraba la grama y fundamentalmente las dimensiones. Vi que era una cancha de poco espacio entre posición de área grande y las posiciones de las bandas laterales. Entonces eso obviamente a un equipo que trata de tener amplitud en el campo, abriendo con sus extremos el campo, como lo hace Brasil para estirarlo defensivamente, a una línea de cinco se le hacen más cortos los espacios para poder recorrerlos”, develó. Y luego, añadió: “Nosotros teníamos que tener bien cerrado el centro del campo para que ellos no encuentren los espacios y que cuando iban por las bandas teníamos que estar doblados en las marcas para tanto Raphinha como Vinicius o Rodrygo, que cambiaban posiciones”.
Durante la rueda de prensa, el ex seleccionador de Ecuador también confesó qué fue lo que les dijo a sus dirigidos durante el entretiempo. “Una de las cosas que les dije en el primer tiempo es ‘¿quieren que le diga la verdad o que les mienta?. Los jugadores me dijeron ‘díganos la verdad’. Si seguimos jugando así, lo más probable es que perdamos el partido. Si nosotros no lo obligamos a retroceder a Brasil, lo más probable es que no podamos aguantar 90 minutos defensivamente. Que Brasil te puede llegar a someter es probable, porque tiene las capacidades como para poder hacerlo, pero que nosotros tenemos que obligarlo a retroceder a Brasil es lo que nosotros necesitamos hacer”.
“Hoy por hoy fue una prueba. Yo le decía a estos chicos, que para la mayoría eran las primeras batallas que daban en este clase naturaleza, con la responsabilidad que significa esto. La diferencia era era muy grande y sabíamos que era muy grande. Ahora el tema era que dentro de la cancha nosotros hagamos lo humanamente posible para tratar de igualarlo. Lo hicimos cuando no teníamos la pelota, no lo hicimos cuando teníamos la pelota, porque por momentos tuvimos tenencia. Pues yo le decía cuando nosotros podemos romper la primer presión, no es que Brasil no retrocede, sino que es una estrategia de Brasil dejar venir porque dejan sus cuatro hombres arriba para atacar verticalmente. Y ahí es donde cuando uno rompía la primer presión de Brasil. No había que apurarse a la tenencia de la pelota, atacarlo por los costados a tratar de terminar la jugada. Y creo que esas son las cosas que a nosotros nos quedan en el debe. Ojalá que este partido, esta enseñanza, este desafío que hemos enfrentado, nos sirva para crecer, porque dentro de dos años, quizás, ojalá en el futuro, nos volvamos a cruzar con Brasil en otro tipo de competencia. Y Brasil obviamente que va a seguir siendo Brasil y va a seguir siendo tal vez mejor, pero que nosotros si esto lo capitalizamos bien, tenemos un tiempo importante para crecer para adelante”.
Para cerrar, comentó: “Lo importante es que los chicos tuvieron la templanza, la capacidad, como les dije, para saber transitar la incomodidad del partido. Para saber sufrir, para saber aguantar en determinados momentos, para manejar los tiempos. Nos falta todo el otro trabajo y todo el otro trabajo es todo lo que queda en el debe”.