Las crónicas de los diarios bahienses hace casi una semana cuando salieron las designaciones arbitrales, ya daban cuenta de lo que podía pasar. Una etapa decisiva del Federal A y un árbitro archi polémico con antecedentes que poco lo ayudaban como para hacer creer que el encuentro se resolvería dentro del campo de juego. Lo cierto es que esa crónica con final anunciado se cumplió con una eliminación escandalosa de Olimpo de Bahía Blanca en manos de Sarmiento de La Banda de Santiago del Estero por los Cuartos de final del certamen. ¿El árbitro? Joaquín Gil, el mismo que se vio involucrado en un encuentro que prácticamente terminó decretando el descenso desde el Federal “A” de Sportivo Desamparados ante Liniers de Bahía Blanca, hace dos años.
Lo cierto es que Gil volvió a ser el protagonista de un escándalo. En la previa no más, la dirigencia de Sarmiento no aceptó que el partido sea televisado por medios bonaerenses, que no haya cámaras en el estadio y que nadie pueda filmar con los teléfonos celulares. Algunos integrantes de la delegación olimpiense con décadas ligados al fútbol, aseguraron no haber visto nada igual en ninguna de las categorías por donde les tocó transitar. “Lo que pasó fue una locura, imposible de describir con palabras; nunca en mi carrera me tocó vivir algo así, y espero que nunca más me toque”, dijo el ex San Martín Facundo Affranchino en un video que grabó, tras el encuentro, para el sitio Simplemente Aurinegro.
Olimpo y Sarmiento habían igualado 1 a 1 en la ida con un arbitraje polémico de Fernando Rekers, que no le cobró un penal y tuvo un par de fallos cuestionables más. De todas formas, el gol de Olimpo había tenido una posición adelantada previa que el juez de línea no advirtió. El domingo, ya en el cotejo de vuelta, Gil contó con la colaboración de los asistentes Joaquín Badano y Guillermo Yacante. El dueño de casa avanzó a semifinales luego de comenzar ganando con gol de Rodrigo Herrera -de penal-, a los 21 minutos, mientras que el sanjuanino Leandro Espejo había establecido la paridad para el aurinegro a los 23 minutos.
Según relataron los periodistas partidarios de Olimpo que el cuarto árbitro, Gustavo Benites, escondía las pelotas para que el aurinegro no jugara rápido. Pero el plan en La Banda no incluyó solamente lo deportivo, sino que fue más allá. La seguridad privada de Sarmiento impidió que Voces Aurinegras, el medio que transmite todos los partidos de Olimpo gratis por Youtube, pudiera emitir imágenes. Para colmo, tras el cierre del encuentro, la seguridad privada se metió en la cancha y hubo agresiones a los jugadores de Olimpo.
De esta manera, Sarmiento de La Banda, equipo de Santiago del Estero -tierras del tesorero de la AFA Pablo Toviggino-, continúa en pelea por un ascenso a la Primera Nacional y pareciera querer sumarse a los ascensos de clubes de aquella provincia que sucedieron en los años recientes: Central Córdoba, Mitre y Güemes.
EL ANTECEDENTE QUE TOCÓ A SAN JUAN
Los escándalos en la vida de Joaquín Gil ya son moneda corriente. Solo basta con escribir su nombre y sumarle la palabra escándalo en Google para que aparezcan decenas de notas relatando sobre los polémicos arbitrajes en el que el sanpedrino fue partícipe. Si bien su punto cumbre y su “momento de fama” llegó a comienzos del 2024, cuando le dio un penal inexistente a Deportivo Riestra ante Comunicaciones, por la Copa Argentina, antes hubo decenas de partidos que lo tuvieron a él como protagonista principal. En San Juan, Desamparados lo padeció en la campaña que terminó con el descenso del conjunto sanjuanino desde el Federal “A” en octubre 2022.
Desamparados peleando por la permanencia justamente ante Liniers tenía un partido clave en Bahía. En el club de Puyuta ya viajaron conociendo los antecedentes del juez y comenzaron a concretar esa pesadilla a los 23 del primer tiempo cuando expulsó -por un supuesto exceso verbal- a Santiago Ceballos. Siguió con cada uno de los fallos en favor del local, cada dividida era para el local. Continuó expulsando en el entretiempo al DT Ricardo Dillon y el momento cumbre llegó en el complemento, cuando ya notando que el encuentro terminaría 0 a 0, sancionó un penal en favor de Liniers por una supuesta mano de Lucas Ceballos que únicamente él notó.
Lógicamente la decisión provocó que los jugadores de Desamparados se fueran contra él, incluso el capitán de ese Sportivo Matías Garrido, terminó llorando de la impotencia por no poder dirigirle la palabra a Gil y la imagen del Gambetita salió reflejada en la transmisión televisiva. Finalmente y a pesar de todo eso en contra, el arquero víbora Jairo Díaz terminó atajando ese remate y evitando la derrota. El encuentro terminó 0 a 0, el punto prácticamente salvó al conjunto local mientras que lo dejó al Víbora al borde del descenso que se produjo una semana después, lógicamente con un plantel diezmado teniendo en cuenta que en el informe notificó a varios jugadores que luego fueron sancionados hasta con cuatro fechas de suspensión.