Fue una pelea histórica para el boxeo mundial y especialmente para el mexicano porque dos de sus mejores exponentes de la actualidad se encontraron en el ring montado en Las Vegas. Saúl Canelo Álvarez venció a Jaime Munguía por falló unánime: las tarjetas de los jueces marcaron un 117-110, 116-111 y 115-112 para el mexicano, que retuvo todos sus títulos mundiales. Más allá del resultado, ambos cumplieron con las expectativas sembradas durante todas las semanas previas y devolvieron un evento de alto voltaje.
Durante los tres primeros rounds el retador presentó batalla y dominó el pleito, poniendo por momentos en dificultades al campeón Álvarez. Pero en el cuarto apareció el alma del Canelo para explotar un bombazo en el rostro de Munguia, que terminó en la lona. A lo largo del quinto trabajó sobre su rival, le hizo sentir el poder de sus puños. A los 33 años, demostró en todo momento por qué es uno de los apellidos que quedará en la historia del pugilismo y siempre tuvo conexiones peligrosas en cada una de las rondas. Inclusive en el round final conectó una serie de golpes que pusieron en riesgo la integridad física de su rival, que de todos modos mostró gran capacidad de absorción para mantenerse de pie.
El camino rentado del Canelo empezó hace ya casi dos décadas, aunque su nombre resonó con fuerza en el gran mundo del boxeo con aquella recordada derrota en las tarjetas en decisión mayoritaria ante el invencible Floyd Mayweather Jr. durante una velada celebrada en el MGM Grand Arena de Las Vegas durante 2013. Previamente ya había mostrado su poder en presentaciones brillantes derrotando al argentino Carlos Baldomir, a Shane Mosley, Josesito López y Austin Trout, por citar algunos casos.
Perder contra The Money no detuvo el camino ascendente de Álvarez, que tras aquel día sacó de su camino a Alfredo Angulo, Erislandy Lara, James Kirkland, Miguel Cotto, Amir Khan y Julio César Chávez Jr. antes de desembarcar en las memorables presentaciones contra Gennadiy Golovkin, con tres combates entre 2017 y 2022.
Sin embargo, a los 33 años, volvió a vivir contra su compatriota Munguía una de las peleas más esperadas del año. Desde hacía tiempo se pronosticaba que Jaime iba a ser uno de los que se encaminaba a pelearle el cetro. 60 éxitos (39 KO), 2 derrotas y 2 sin ganador eran las estadísticas de Saúl antes de esta presentación en Las Vegas. Un detalle, para nada despreciable, es que en 2022 había sufrido la segunda derrota de su vida en las tarjetas contra el ruso Dmitrii Bivol, en el peso medio pesado.
Tras aquel suceso, retornó a su camino habitual e hilvanó tres victorias firmes por decisión de los jueces ante Golovkin, John Ryder y Jermell Charlo.
Munguía, de 27 años, llegó a este fin de semana con un registro que verdaderamente metía miedo: 43 triunfos en los que firmó 34 nocauts. Sin derrotas, sin empates. Con sus puños había hecho sufrir recientemente Sergiy Derevyanchenko y el mencionado Ryder, pero sin dudas que este fin de semana en Las Vegas fue su primera gran presentación.
“Esperé mi momento; Munguía es un gran boxeador, fuerte, aunque un poco lento y pude pegar a la contra. Ahora estoy en posición de hacer lo que quiera y pedir lo que quiera”, remarcó Álvarez, al referirse a la posibilidad de enfrentar a David Benavides, quien ha pedido que se respete su condición de retador mandatorio del Consejo Mundial de Boxeo, pero ha sido ignorado.
No es un detalle menor recordar que durante uno de los últimos eventos de presentación de la velada se vivió un momento de absoluta tensión cuando Álvarez se cruzó con su ex promotor, el histórico pugilista Oscar de la Hoya. “Parece que tiene problemas para recordar quién lo ayudó a convertirse en una estrella global”, le reclamó el ex campeón mundial. Y el Canelo salió al cruce, a punto tal que debió ser separado, y luego lo fulminó en el micrófono: “Para este imbécil intento de gente que tengo a mi izquierda que no se le olvide que yo ya vine siendo el Canelo a Estados Unidos, y que siempre lucró con mi nombre, nunca perdió un sólo centavo, sino más, ganó dinero. Lo único que hace este hombre es ser una lacra del boxeo, robarle a los boxeadores”.
En la coestelar, el argentino Fabián TNT Maidana cayó de manera unánime en las tarjetas tras batallar durante 12 rounds, pero sin poner en riesgos al Azteca Mario Barrios. El hermano del Chino dejó pasar la chance de obtener el título mundial interino del peso welter del Consejo Mundial de Boxeo en la que fue la presentación más importante que atravesó en su carrera. El registro ahora del peleador de 31 años indica que tiene 22 triunfos (16KO) y 3 derrotas, mientras que su rival suma ahora 29 victorias (18KO) y 2 peleas perdidas ante Gervonta Davis y Keith Thurman.