Argentinos Juniors le ganó 1-0 a River con un golazo de Alen Lescano en el Estadio Diego Armando Maradona, por la tercera fecha de la Liga Profesional 2024. De esta manera, el entrenador Martín Demichelis volvió a recibir un duro golpe tras la histórica eliminación ante Temperley en la Copa Argentina.
El partido se jugó como una verdadera final desde que el árbitro Leandro Rey Hilfer sonó el silbato. Fue un primer tiempo parejo, con llegadas claras, mucha energía y pierna fuerte, como los dos planchazos (Leandro González Pirez a Gonzalo Verón y Jonathan Galván a Rodrigo Villagra) que insólitamente no fueron sancionados con tarjeta.
Lo intentó Miguel Borja en la primera que tocó, pero su derechazo con la cara abierta se fue besando el palo izquierdo de Diego Rodríguez. Argentinos Juniors no se quedó atrás, presionó para recuperar rápido la pelota y provocó serios desajustes en su rival. Tuvo dos situaciones a través de Luciano Gondou, luego de varias desatenciones de River a la espalda de Rodrigo Villagra, que no resolvió de la mejor manera.
Hasta que Alan Lescano marcó un verdadero golazo para quebrar el encuentro. Borja no pudo pararlo desde atrás, tampoco achicó Villagra, y como González Pirez estaba atento a Gondou y Gastón Verón, se produjo un hueco que nadie tapó. Así, el ex-Gimnasia vio adelantado a Franco Armani y sacó un estupendo zurdazo para que la pelota se eleve y caiga a la espalda del arquero de la Selección Argentina.
River, que acudió a los pelotazos al doble nueve de contra y a un remate de Rodrigo Aliendro desde larga distancia para inquietar, sintió el impacto y a partir de ese momento no hizo pie. Es más, casi le convierten el segundo en apenas un minuto. Un fuerte remate cruzado de Gondou se abrió y le perdonó la vida al equipo de Martín Demichelis antes de los vestuarios.
Si bien se jugó poco en el segundo tiempo, Argentinos Juniors buscó el segundo gol con dominio y la idea de liquidar el cotejo para no sufrir en el final. Tuvo varias chances para definirlo, la mayoría en los pies de Gondou, a quien le anularon un gol por offside y quien despertó el enojo de Armani cuando intentó picársela en uno de los mano a mano.
El Millonario, en tanto, no pudo inquietar demasiado ni generar sociedades en el ataque, a pesar del ingreso de Pablo Solari. El equipo estuvo muy desorganizado en el medio y solo el ex-Colo-Colo probó con un cabezazo que Rodríguez alcanzó a manotear al córner.