El de Banfield ya es un taladro de exportación porque goleó anoche al Deportivo Cuenca 4-1, a pesar de que se desarrolló a 2.550 metros sobre el nivel del mar el partido correspondiente a la segunda fecha del Grupo 6 de la Copa Libertadores de América. Los albiverdes están en la cima de la zona y con puntaje ideal porque en el debut ya habían superado al Morelia mexicano 2-1 en el Florencio Sola.
En la noche ecuatoriana los goles visitantes los marcaron el uruguayo Sebastián Fernández en dos ocasiones, Walter Erviti y el colombiano James Rodríguez. Sobre el epílogo del cotejo descontó Gastón Méndez, de penal.
Lo único malo para los bonaerenses fue la expulsión del defensor Marcelo Bustamante, la que se produjo por doble amonestación. La segunda amarilla se la sacaron en la escena que derivó en el penal que luego aprovechó Méndez.
El primero en anotar fue Erviti, quien a los 35 minutos del período inicial recogió un rebote fuera del área grande y clavó la pelota en un ángulo.
Apenas habían pasado tres minutos del primer festejo cuando Fernández dio una muestra de oportunismo y capitalizó una atajada provisoria de Esteban Dreer.
En la segunda parte el oficio de Papelito Fernández para valerse de otro error del guardameta anfitrión le permitió a Banfield ponerse 3-0, a los 15 de la segunda mitad, por lo que la victoria quedó garantizada, a pesar de los otros dos goles (uno para cada uno).
Lo concreto es que Banfield dio una lección de juego firme, inteligente y eficaz, y lo hizo bien lejos de su casa. Inclusive en la altura, algo que muchos equipos argentinos le temen y generalmente pierden nivel. El equipo de Falcioni lidera el grupo y es indudable que será un protagonista a tener en cuenta.

