El seleccionado de Uruguay, con un "doblete" de su estrella Luis Suárez, logró un vital triunfo en su afán por clasificar a Octavos de final, tras derrotar por 2-1 a Inglaterra, que prácticamente quedó eliminada, en la segunda fecha del Grupo D.
Suárez, operado del menisco izquierdo el 22 de mayo pasado y que no pudo jugar en el debut ante Costa Rica, marcó a los 39 minutos del primer tiempo y a los 40 del segundo, mientras que Wayne Rooney había logrado la igualdad transitoria a los 30 del complemento en el estadio Arena Corinthians de San Pablo.
El trascendental encuentro de ayer mostró un choque de estilos bien marcados y a su vez diferentes: por un lado el clásico 4-4-2 de los "celestes" propuesto por el "Maestro" Oscar Tabárez, contra el 4-2-3-1, muy de moda en Europa, de los ingleses de Roy Hodgson.
En definitiva, el conjunto oriental celebró gracias a su famosa "garra charrúa", porque cada vez que estuvieron en peligro los tres puntos vitales para la clasificación, sus jugadores entregaron un plus extra, muy diferente a la actitud de sus rivales, que a la postre les valió la victoria y el hecho de seguir con vida.
En el primer tiempo, Uruguay arrancó mejor con un par de llegadas, pero fue Inglaterra la que dominó el balón y tuvo una muy clara con un tiro libre a los 9m. que se fue pegado al palo de Rooney, quien no había podido convertir en sus 9 partidos anteriores en Mundiales sumando Alemania "06 y Sudáfrica "10. Uruguay cuando tuvo una clara no la desaprovechó pues a los 38m. Cristian Rodríguez habilitó por izquierda a Cavani y este le puso un preciso "centro-pase gol" a la cabeza de Suárez, quien definió al palo cambiado de Joe Hart para permitirle a su equipo irse al descanso con la ventaja a su favor.
En el complemento, como dice el refrán "tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe", y así Inglaterra merodeó una y otra vez el área rival hasta que un desborde a los 30m. de Glen Johnson por la derecha, le dejó servido el gol a Rooney, quien por fin pudo anotar en su décimo juego mundialista.
Los europeos pudieron darle el golpe de "knock out" con un remate de Daniel Sturridge que tapó otra vez Muslera, pero lo dejaron vivir a Uruguay, que se despertó, se adelantó en la cancha y valiéndose de la tradicional "garra charrúa" llegó al triunfo.
Fue justamente otra vez por intermedio del artillero Suárez, quien aprovechó que un defensor rival no pudo despejar un pase largo y se fue solo hacia el área para definir con un fortísimo remate y hacer explotar a los miles de celestes en el estadio.