Hay partidos que por sí solos pueden marcar un quiebre en la campaña de un equipo. Si eso es lo que ocurre a partir del triunfo ante Rebels dependerá de la capacidad que tenga Jaguares de capitalizarlo. Por lo pronto, es momento de disfrutar una victoria que, por la jerarquía del rival, los contratiempos que debió superar el equipo a lo largo de la semana y la adversidad que padeció durante el partido, tuvo ribetes épicos.

 

El desahogo de los jugadores cuando sonó el pitazo final, el festejo eufórico y sentido de todo el plantel, dan cuenta de la importancia que tiene este éxito para un equipo de Jaguares que está urgido de resultados positivos cuando, aun mostrando progresos, en los primeros siete partidos de la temporada había padecido cinco derrotas. Un saldo que no reflejaba la capacidad que, por momentos, el equipo había logrado plasmar, como en este encuentro.

 

En la madrugada del sábado, Jaguares mostró ese hambre de triunfo y ese carácter necesarios en los tramos decisivos del partido para dar vuelta un marcador adverso e imponerse por 25-22 a los líderes de la conferencia australiana.

 

Fue un encuentro vibrante, que comenzó de manera desfavorable para Jaguares. Al inicio del segundo tiempo se vieron en desventaja 19-6 tras sufrir tres tries de primera fase y luego de desaprovechar incontables oportunidades de marcar y de todas las formas posibles, un mal que aqueja a los argentinos desde su ingreso en el Super Rugbyhace dos temporadas y media.

 

Sin embargo, en los últimos 30 minutos Jaguares impuso condiciones a partir de una defensa granítica ante uno de los ataques más temibles de la competencia y del ímpetu para ir hacia adelante cada vez que tenía posesión.

 

Primero un par de tries de los wings para ponerse a tiro y a falta de seis minutos para el final la conquista de Bautista Ezcurra, luego de que Leonardo Senatore tapara magistralmente un kick en la salida del medio-scrum, puso a Jaguares arriba por primera vez en el partido.

 

 

En los instantes finales hubo tiempo también para el sufrimiento. Rebels encadenó una jugada de 35 fases que duró 3m41s, pero Jaguares resistió a puro tackle, con orden y contundencia. Con el tiempo cumplido, hubo una más: Jaguares regaló un penal que el local cambió por scrum en lugar de buscar el empate servido y el empuje argentino evitó un ataque cómodo y favoreció el robo de pelota subsiguiente.

 

Cabe destacar algunas actuaciones individuales sobresalientes. Ramiro Moyano y su determinación para avanzar con la pelota, incluido un try en el que embistió a tres rivales antes de zambullirse en el in-goal. Nicolás Sánchez, clínico para generar espacios con pases planos y penetraciones. Pablo Matera, clave como ball carrier. Marcos Kremery Guido Petti Pagadizábal, incansables a la hora de tacklear.

 

Jaguares consiguió así su primera victoria en lo que es la gira de mitad de temporada, la segunda de tres, que en los años anteriores había provocado siete derrotas en igual cantidad de partidos. Mayor mérito adquiere el triunfo cuando se consideran las dificultades que tuvo Jaguares a lo largo de la semana. Primero se postergó el vuelo que debía salir el domingo. Luego debieron pasar un día en Chile, donde hicieron el entrenamiento más exigente de la semana. Previas escalas en Auckland y Sydney, llegaron a Melbourne dos días antes del partido, sin tiempo para adaptarse a las 13 horas de diferencia horaria. Y como si fuera poco, arribaron al estadio sobre la hora por un inusual embotellamiento.

 

 

Quedan así y todo algunos aspectos por corregir, puntualmente el aprovechamiento de las oportunidades y el line-out (15/20), y en menor medida el juego con el pie. Pero en términos generales, del primer partido a éste el progreso ha sido sostenido.

 

Más importante es el impulso anímico que genera un triunfo tan importante a partir de la actitud que mostró Jaguares para sobreponerse primero a las complicaciones logísticas y, sobre todo, a los aprietos en los que se vio durante el partido. La gira sigue con otro compromiso exigente pero factible, el domingo 22 ante Brumbies en Canberra. Luego, dos partidos en Nueva Zelanda. Construir a partir de este impulso anímico es el objetivo.

 

Síntesis

Melbourne Rebels 22: Dane Haylett-Petty; Jack Maddocks, Tom English, Billy Meakes y Marika Koroibete; Jack Debreczeni y Will Genia; Richard Hardwick, Amanaki Mafi y Ross Haylett-Petty; Adam Coleman y Geoff Parling; Sam Talakai, Anaru Rangi y Tetera Faulkner. Entrenador: David Wessels.

Cambios: ST Colby Fainga’a por Hardwick; 9m, Michael Ruru por Genia; 11, Jordan Uelese por Rangi; 15, Ben Daley por Koroibete (temporario); 18, Matt Philip por Parling; 24, Jermaine Ainsley por Takali; 25, Lopeti Timani por R. Haylett-Petty; 36, Rangi por Uelese.

Suplente: Sefa Naivalu.

 

Jaguares 25: Emiliano Boffelli; Ramiro Moyano, Matías Orlando, Jerónimo de la Fuente y Sebastián Cancalliere; Nicolás Sánchez y Martín Landajo; Marcos Kremer, Javier Ortega Desio y Pablo Matera (c); Tomás Lavanini y Guido Petti Pagadizábal; Nahuel Tetaz Chaparro, Julián Montoya y Santiago García Botta. Entrenador: Mario Ledesma.

Cambios: PT 23m, Joaquín Tuculet por Boffelli (temporario). ST 9m, Tuculet por Boffelli; 17, Agustín Creevy por Montoya y Matías Alemanno por Lavanini; 24, Leonardo Senatore por Ortega Desio; 25, Bautista Ezcurra por De la Fuente; 36, Gonzalo Bertranou por Landajo y Javier Díaz por García Botta.

Suplente: Juan Pablo Zeiss.

 

Puntos

PT: 7m, penal de Sánchez (J); 9 y 19, goles de Debreczeni por tries de Meaks y Koroibete (R).

ST: 4m, penal de Sánchez (J); 8, try de D. Haylett-Petty (R); 10 y 35, goles de Sánchez por tries de Cancelliere y Ezcurra (J); 16, try de Moyano (J); 24, penal de Debreczeni (R).

 

Amonestado: 15m, Faulkner (R).

Cancha: AAMI Park, Melbourne

Árbitro: Nic Berry (Australia)