Vélez Sarsfield conservó la punta del Clausura y dejó sin invicto a Independiente, al ganarle 3-0, por la 5ta. fecha del torneo.
El equipo de Gallego se suicidó con un pésimo funcionamiento defensivo ante un Vélez que hizo honor al concepto de equipo pese al profundo recambio de nombres.
La apertura se produjo por una combinación del debutante Bíttolo con Martínez, quien después de eliminar a Tuzzio con una gambeta en el área doblegó a Gabbarini con un zurdazo cruzado.
Antes del gol, en el final del primer tiempo, Independiente se había mostrado dominador del juego y un poco más agresivo.
Piatti, en tándem con Hernán Fredes por derecha, y con la asistencia de Walter Acevedo como eje en el medio produjo lo mejor del juego visitante.
En el segundo tiempo, Vélez estableció una clara diferencia en el juego favorecido por una marcación rival con enormes desajustes.
El segundo gol, marcado de penal por Moralez, nació de un largo pelotazo de Razzotti en campo propio que dejó a Coronel cara a cara con Gabbarini, que lo derribó en el intento de gambeta.
Tras esa acción, el desconcierto defensivo de Independiente fue tal que Vélez tuvo tres ocasiones clarísimas para el tercero en tres minutos correlativos.
Gallego, impávido, era un claro reflejo de lo que su equipo transmitía dentro de la cancha. Los cambios introducidos en el complemento empeoraron a su equipo.
Como corolario de una noche fatal, un "blooper" de Gabbarini le entregó el tercer gol a Silva. El arquero, al pararse después de descolgar un centro, perdió increíblemente la pelota y el goleador no lo perdonó.

