El seleccionado argentino femenino de hockey sobre césped, Las Leonas, último campeón mundial, se convirtió en finalista de los Juegos Olímpicos al vencer al local, Gran Bretaña, por 2 a 1 y de esta manera se aseguró, al menos, la medalla de plata, en el estadio Riverbank Arena de Londres. Los goles del equipo que dirige Carlos Retegui los convirtieron Noel Barrionuevo y Carla Rebecchi, a los 5 y 33 minutos de la primera etapa, respectivamente; mientras que Alex Danson, a los 29m. de la segunda, descontó para las británicas. Argentina, segunda del ranking mundial y ganadora de las medallas de plata en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 y de bronce en Atenas 2004 y Beijing 2008, enfrentará en la final a Holanda, número uno del mundo y oro en Beijing 2008, plata en Atenas 2004 y bronce en Sydney 2000 y Atlanta 1996, mañana a las 16 (hora de nuestro país).
Argentina ratificó ese buen rendimiento contra Gran Bretaña, segunda de la zona A y cuarta del mundo, con un muy buen primer tiempo, donde golpeó de entrada con el gol de corner corto de Noel Barrionuevo, el primero en el torneo, a los 5 minutos, y también sobre el final con otro de Carla Rebecchi, a los 33.
Pero la principal virtud del elenco nacional fue la presión que ejerció en campo rival durante todo el período. A partir de eso, edificó un triunfo memorable.
Otra fue la vez la solidez defensiva y la tercera y, tal vez la más importante (porque con eso se ganan los partidos), la contundencia en ataque.
El segundo tiempo tuvo la misma tónica que el primero: más lucha que juego, pero las británicas fueron más ambiciosas, tuvieron algunas oportunidades de descontar, pero chocaron con la solidez defensiva y la seguridad de Florencia Mutio, la arquera argentina, hasta los 29 minutos cuando Alex Danson anotó el gol británico.
De ahí hasta el final fue todo nervios, angustia y dramatismo. Aymar, Barrionuevo, Rebecchi y Rosario Luchetti, las cuatro jugadoras que siguen en el equipo tras obtener la medalla de bronce en Beijing 2008, más el resto, herederas y el futuro asegurado, se unieron en un festejo interminable.

