Entre la expectativa por el reencuentro con el público sanjuanino luego de cinco años y la incertidumbre por el rendimiento de los autos al calzarse nuevas gomas transita Fabián Flaqué en la recta final de la previa de la séptima fecha de Top race que se realizará del viernes al domingo próximo en el autódromo ‘El Zonda-Eduardo Copello’.
Flaqué fue uno de los protagonistas de la última presentación de la denominada categoría espectáculo en la Quebrada Rugiente, el 16 de octubre de 2011. En aquella ocasión ganó Agustín Canapino, Henry Martin chocó a 170 kilómetros por hora a otro vehículo y Flaqué no contó con un auto con buen rendimiento, para ver la bandera a cuadros en el puesto 18.
A pesar que desde aquel entonces el Top Race fue siempre la categoría nacional que más sanjuaninos convocó en todas las temporadas, con tres campeones (Della Motta en TR Junior en 2012, Martín en TR Series en 2013 y Flaqué el año pasado en TR Series) recién en este 2016 se dieron las condiciones para que regresara.
El experimentado piloto que regresó esta temporada a la categoría principal tras el título del año pasado reconoció que es imposible no sentir algo especial por esta presentación. “Después de cinco años volver a correr en un circuito muy querido, con la gente que apoya y alienta, además de mis seres queridos, indudablemente que me despierta una expectativa muy particular”, reconoció directamente.
Además, Flaqué felicitó por el resultado de las obras de remodelación que se realizaron en el ‘8 sanjuanino’: “El autódromo está en impecables condiciones después de los trabajos que se le hicieron y eso también alegra este regreso”.
En esta temporada Flaqué vive un periodo de adaptación que además se vio salpicada por dosis de mala suerte. En la última carrera, cuando había conseguido una buena puesta a punto del Mercedes #17, junto al equipo SDE Competición, y clasificó en el 8vo lugar, las pretensiones de una gran carrera se frustraron en la primera curva cuando quedó encerrado en un toque de más adelante y embistió a Canapino.
“Lo cierto es que desde esta carrera hay una especie de barajar y dar de nuevo porque los autos tendrán gomas nuevas, con un compuesto más duro, que no habían utilizado antes. Será investigar en la nueva puesta a punto y también en el manejo, porque ahora los autos tendrán menos ‘grip’ (adherencia al pavimento)”, concluyó el piloto.