Partido decisivo para todos. Adentro y afuera. Así se vivió el Alianza-Unión, marcado por muchas interrupciones en el primer tiempo especialmente y con un cierre con incidentes en la platea local. A los 25’ del primer tiempo, la hinchada de Unión e despachó con piedras dirigidas a la platea y por eso se interrumpió por casi 5 minutos el partido. Parecía todo normalizado pero a los 30’ esta vez fueron los hinchas de Alianza los que arrojaron proyectiles en el sector del asistente Ariza.

En el final, la recriminación de los plateístas para el Beto Gómez motivó la reacción de los hijos del entrenador que terminaron protagonizando una pelea con algunos hinchas de Alianza.