Una noche inolvidable. De esas que a todo amante futbolero le apasiona vivir y de las que últimamente producto de la violencia es casi imposible lograr. Sportivo Desamparados y Unión de Villa Krause se enfrentaron en el Estadio del Bicentenario en una noche única donde el folklore del fútbol volvió a renacer. Familias enteras, hinchas de todas las edades, de los añejos y de los más jóvenes se dieron cita en el coloso de Pocito. Era un espectáculo que nadie se quería perder.

Unión en la previa llegaba más entonado al encuentro. El presente de los de Villa Krause en el Argentino B, acrecentaba las esperanzas de los azules por pasar de fase en la Copa. Mientras que por el lado de los de Villafañe, el mal presente que vive el equipo en el Argentino A, era una buena excusa para recriminar una y otra vez al entrenador Víbora.

El amplio operativo policial compuesto por 350 efectivos policiales que estuvieron apostados desde Ruta 40 hasta el ingreso mismo del Estadio, fue clave para que el evento se disputara sin incidentes. Solo algunos disturbios efectuados en el ingreso del estadio por los hinchas de Unión con la Policía fue la mancha negra del evento.

Los simpatizantes comenzaron a llegar desde temprano. Fueron los de Unión los primeros en arribar y coparon en un 70 por ciento la tribuna Sur. “Así así, así así, sos igualito a San Martín” comenzaron cantando los hinchas de Unión en referencia al archirrival de Sportivo. “No te olvidés, no te olvidés.. como te fue la última vez..” replicaron los puyutanos desde la tribuna Norte refiriendose al último encuentro entre ambos por el Torneo Local. Ese día, el encuentro se suspendió a los 11 minutos por serios incidentes entre ambas hinchadas. Eso le dio un plus extra al encuentro de anoche.

Lo cierto es que el juego se vivió como un verdadero clásico donde la emoción estuvo a flor de piel. Los puyutanos casi tuvieron su momento gloria con el remate errado por Gutiérrez. Los de Unión casi gritaron con el cabezazo de Fernández pero se quedaron con las ganas. Pero eso no importaba, el segundo tiempo les tenía deparado más emociones en los penales donde fueron los azules los que festejaron. La noche pasó y por suerte, la violencia no los superó.