Es un choque especial desde hace tiempo. Ser los únicos representantes en la categoría por San Juan así lo imponen. Y el sábado, nuevamente con el Bicentenario de Pocito de escenografía, lejos estará de ser la excepción. Más bien todo lo contrario. Será un partido, que ya transitando la segunda rueda de la Zona Sur del Federal A, les puede marcar el futuro a Desamparados (que hará de local) y Peñarol.
A partir de las 15 horas, será un duelo entre dos necesitados de puntos. De escalar en la tabla de posiciones. Por el lado del puyutano, ya pasó la euforia por el regreso de ese hombre que acumula dos ascensos en su currículum vitae: Ricardo Dillon. El desembarco del Flaco derivó en la victoria ante Liniers (2-0), el buen empate en San Luis ante Juventus (1-1) y la caída el sábado visitando a Ferro (1-3). El víbora tuvo a cuatro técnicos en estas 18 fechas y hasta ahora se encuentra último en la tabla, por ende en puesto de descenso. Algo que siempre estuvo presente en esta campaña en el hincha de Desamparados y que busca no se haga realidad. Dillon y su reconocida capacidad tienen la dura misión de sacarlo adelante, con un plantel corto y en gran medida carente de jerarquía individual.
En la vereda del Bohemio la situación se complicó hace poco. Dos fechas para ser exactos. El 0-1 con Villa Mitre y el 1-2 del domingo ante Cipolletti, ambos en Chimbas, pusieron otra vez a Cristian Bove en el foco de las críticas. Incluso, por Chimbas se habla que su continuidad podría estar atada a un buen resultado el sábado en Pocito. Cierto o no, Peñarol ya no está en zona de clasificación e incluso de no mejorar deberá prestar atención nuevamente a la zona baja del descenso, que actualmente lo separan tres unidades.