Podría haber sido la final, o quizá incluso lo termine siendo, pero los ‘caprichos’ del fixture quisieron que fuera el primer partido de ambos. Argentina-España se vivió anoche como el choque por la gloria y de ahí, lo picante que estuvo durante los 25 minutos e incluso luego del encuentro cuando se dio la máxima tensión justo al momento de los saludos entre los hockistas.
El epicentro de los empujones y discusiones se dio cuando el capitán albiceleste, Carlos Nicolía, se cruzó en el saludo con el arquero español, Sergi Fernández. La ‘pica’ venía del libre que ejecutó el número 5 de la Argentina cuyo remate le dio en la careta al cuidapalos. Ahí se dio un cruce verbal que no pasó a mayores, pero al momento de los saludos finales, Fernández le dijo algo a Nicolía, este le respondió y entonces hubo cruce de ‘cachetadas’ en la cara. Eso generó que varios jugadores de ambos seleccionados se empujaran y otros buscaran dar calma a ese momento, innecesario, ya después del 4-2 albiceleste. Se fue el capítulo uno, Acaso el destino los vuelva a cruzar…

