Manteniendo un ritmo constante y demoledor, el rionegrino Nicolás Traico, se impuso ayer en la tercera edición de la Vuelta del Este, competencia que organizaron el Caucete Pedal Club y la Asociación Civil Deolinda Correa. El hombre que este año llegó para sumarse al SEP San Juan, había mostrado las uñas en las carreras anteriores trabajando para ayudar a sus compañeros a llegar en los fallidos embalajes finales. Con la experiencia anterior que indica que en el Villicum no se dan embalajes masivos o en grupos grandes decidió jugarse la "heroica" y apostó a sus pistones curtidos en el ciclismo de montaña y logró graduarse en la capital del ciclismo rutero argentino. Durante los 140 kilómetros que tuvo la competencia hubo una gran lucha de todos los equipos por colocar gente en los grupos que comandaban las acciones. Así fue que en el tercio final se produjo un corte en el que quedaron 40 ciclistas arriba, entre ellos la mayoría de los candidatos.
Los que marchaban a la vanguardia arribaron al autódromo Villicum con casi tres minutos de ventaja sobre el resto por lo que la carrera se circunscribió al grupo de vanguardia. En realidad eso es lo que se creía, porque apenas giraron para ingresar a la pista albardonera Nicolás Traico se sacó la pilcha de obrero y se puso el frac de candidato.
En el afán de marcarse uno a otro, los favoritos de los equipos rivales no salieron a cerrar el hueco de manera inmediata, lo que derivó en el armado de una fuga que fue creciendo a medida que pasaban los cinco giros al trazado de 4,266 km. Ocho hombres ingresó a la última vuelta a 35 segundos de ocasional líder y en ese giro final, Nicolás Naranjo (AV.Fátima) y Laureano Rosas (Puertas de Cuyo) salieron a buscarlo. A su rueda se prendió Darío Álvarez, compañero de Traico que iba como opción para embalar. No hizo falta, el de Allen fue inalcanzable.