Sábado, desde las cuatro de la tarde hasta las diez y cuarto de la noche, puro fútbol. Domingo, desde las tres de la tarde hasta las diez de la noche, puro fútbol. De no poder ver nada del fútbol grande por los canales de aire locales, y de tener que esperar hasta los noticieros del lunes al mediodía para que las retinas le transmitieran al corazón cómo fueron esos pases, esas gambetas, esos goles, a la saturación de no poder ver otra cosa que no sea fútbol. El primer fin de semana de "fútbol para todos" por la tele fue eso, solo fútbol por tres de los cuatro canales de aire sanjuanino: el cinco, el ocho y el diez. Y, contrariamente a lo que cualquier futbolero/ra podría haber pensado hasta el último torneo, tener acceso a los partidos apretando cualquier botón del control remoto, sin muchas posibilidades a otra cosa, terminó siendo lindo por un fin de semana. No más.

Como era de esperar, el grueso de las damas y de los niños sanjuaninos con una antena de elementos en el techo de la casa pusieron el grito en el cielo. Y eso que era el primer fin de semana que no hubo que pagar para ver a los ídolos correr atrás de la pelota. ¿Va a ser siempre así?, fue la pregunta que retumbó varias veces en la casa, en la plaza, en el parque y en el club. Una respuesta que ni al más consumidor de fútbol -más allá de estar chocho con la estatización de la transmisión de los partidos-, se hubiera animado a defender positivamente de la boca para afuera. No por estar en desacuerdo con la decisión K, sino porque el exceso de fútbol también terminó siendo, por momentos, aburrido.

Increíble, pero es así. Pensar que hasta julio se añoraba con poder ver los partidos sin tener que pagar. Ahora que las alternativas al fútbol por el aire fueron poquísimas, empezó a ser un peso.

Para los que tienen televisión por cable o satelital, el cambio notable del fin de semana llegó el domingo a la noche. Es que ya no hacía falta tener que clavar la tele en TyC Sports para ver el resumen de los goles en Fútbol de Primera: también por América los pasaron. Fue a través de Simplemente Fútbol, con la conducción de Alejandro Fantino, los comentarios de Jorge Rial, la cuota de humor de Eber Ludueña y un panel de futbolistas y ex futbolistas.

Mientras que en Fútbol de Primera, al eterno Enrique Macaya se le sumó Fernando Niembro en una extensa entrevista a Marcelo Tinelli.

A esa hora, la tele de aire sanjuanina, volvió a la normalidad.