Los simpatizantes, los que van a la cancha y los que sienten cómo propio cada tropezón de su equipo, son los que miden con esa vara que marca su relación con el equipo y su cuerpo técnico. Y en ese frenesí, el domingo le tocó a San Martín tras perder 3-0. Pero no por lo abultado del resultado, sino por la poca producción del equipo, que se suma a lo hecho ante Huracán, que también fue derrota contundente.

El sábado, en el Hilario Sánchez el termómetro se encendió y los hinchas se lo hicieron saber a Daniel Garnero, al que le gritaron “de todo”, e incluso los plateístas le recriminaron el planteo, los nombres que utilizó y le resaltaron aquellos que no usó.

Apenas van 5 fechas, pero los insultos hacía el plantel marcan que la paciencia para una parcialidad que aún está dolida por el descenso de Primera, no quiere seguir sufriendo. Hoy no le piden el ascenso, le piden triunfos y recursos para lograrlo.

El juego ante Huracán, que fue sin hinchas visitantes, llegó televisado y por ende pudieron ver que el rendimiento grupal e individual dejó mucho para mejorar. Y que se agudizó ante la poca expresión en la caída sobre Banfield. Un cóctel que hizo estallar a los hinchas verdinegros que apuntaron a Garnero como el responsable.

Las radios que transmitieron el partido, tras la finalización del mismo, le dieron espacio a la opinión de los hinchas, quienes se despacharon con frases como: “Que Garnero se deje de inventar”, “Por qué no pone a cada uno en su lugar sin improvisaciones que nos perjudican”, “Dijo que no le hacía falta un volante central cuando asumió y ahora no hay quién juegue en el medio” y “No le hacemos goles a nadie, no entiendo por qué no juega Caprari”.

Mientras que el “Dani”, en conferencia de prensa, se refirió a la despedida que le dieron desde la tribuna. “La gente funciona en reacción de lo que ve, es entendible porque no fuimos precisos ni generamos las situaciones que esperábamos”.

Hasta el vicepresidente de San Martín también se expresó y tiró que “el único que se salvó fue Salas”. Incluso ya hay versiones que el clima en el vestuario no es el mejor y que varios tienen algún malestar con el DT.