
Ernesto Suárez, a quien todos en el ambiente del ciclismo de montaña y de libres en ruta lo conocen, simplemente, por “Tankito” (es el propietario de la fábrica de hielo que lleva ese nombre) se dio el sábado un gusto que pocos ciclistas profesionales pueden darse: compartió pelotón con el británico Christopher Froome.
Participó junto a otros 2.000 ciclistas aficionados de “La etapa australiana by Le Tour” que se realizó en un centro de sky de Jindabyne, ubicado en el Parque Nacional Kosciuszko.
“Vine a visitar a mi hija (María Paz) que vive en Australia y decidimos largar. Se cumplió el pronóstico de mal clima y los australianos acortaron la prueba. Iba a ser de 160 kilómetros y dejaron sólo 105”, contó Suárez.
Ernesto se emocionó al explicar que Froome se tomó el tiempo de agradecer a la mayoría por compartir ese momento con él y “tuvo la humildad de sacarnos una foto que luego nos envío”. Cada participante recibió de regalo una botella de cerveza con etiqueta alusiva y la firma del cuádruple ganador del Tour.
