Buenos Aires, 12 de marzo.- El delantero uruguayo Santiago Silva llegó a un acuerdo con la dirigencia de Lanús y mañana firmará la rescisión del contrato, luego de haber sido marginado del plantel que dirige Guillermo Barros Schelotto.
Después de la sanción que le impuso el club por no haberse presentado a entrenar en el inicio de la semana, el representante de Silva, Martín Guastadisegno, llegó a un acuerdo con la dirigencia que encabeza Alejandro Marón y el delantero se desvinculará de la institución, con la que tenía contrato hasta el 30 de junio.
El cortocircuito entre Silva y la dirigencia de Lanús comenzó previo al encuentro ante Arsenal, cuando el atacante se negó a subir al ómnibus que iba a transportar al plantel a la concentración, presuntamente molesto porque no iba a ser titular ante el equipo de Sarandí.
El futuro de Silva está ahora fuera de Lanús, y Racing, que pensó en él durante el verano, o Quilmes, que es dirigido por Julio César Falcioni, podrían ser su nuevo destino.
El técnico de Racing, Diego Cocca, insistió durante el verano con la necesidad de contar con Silva pero la dirigencia que encabeza Víctor Blanco se negó y finalmente sumó al uruguayo Carlos Núñez, aunque en estas condiciones podría hacer un esfuerzo para incorporarlo.
El otro interesado es Quilmes, ya que Falcioni lo dirigió en el Banfield campeón de 2009 y fue quien quizás contó con la mejor versión del delantero. La principal dificultad para el desembarco de Silva en Quilmes es que el club sumó para este torneo a otros dos centrodelanteros de experiencia como Claudio Bieler y Rubén Ramírez.