Una final más y van… Para el tenista suizo Roger Federer nunca hay techo. Siempre en cada torneo que disputa da muestras que sigue vigente y que avanzar a las instancias decisivas siempre es posible a base de su juego. Ayer, el suizo derrotó al australiano Nick Kyrgios para avanzar a la final del torneo de Stuttgart, Alemania, lo que le permitirá recuperar el puesto número uno del ranking mundial de la ATP.
Federer se impuso a Kyrgios por 6-7 (2/7), 6-2 y 7-6 (7/5), en una hora y 52 minutos de juego, y pasó a la final del certamen sobre césped de Stuttgart, donde enfrentará al canadiense Milos Raonic, con quien ejerce un amplio dominio en el historial entre ambos: de 13 partidos oficiales que jugaron, el suizo le ganó diez.
Federer, de 36 años y 10 meses se aseguró los puntos para desbancar al español Rafael Nadal del primer lugar del escalafón mundial desde el lunes y remarcará, de esta forma, el récord que ya ostentaba como jugador más veterano en la historia en ocupar la cima individual del tenis profesional masculino.
El australiano, de 23, regresaba con este torneo a la competición desde que en abril pasado llegó a los cuartos de final de Houston, una vez recuperado de una lesión en el codo derecho.
Federer disputará el título de Stuttgart ante el canadiense Milos Raonic, séptimo favorito, que derrotó por 6-4 y 7-6(3) al segundo cabeza de serie, el francés Lucas Pouille. Para Federer la de hoy será la cuarta final de la temporada 2018 después de las del Abierto de Australia (superó al croata Marin Cilic), Rotterdam (le ganó al búlgaro Grigor Dimitrov) y el Master 1000 de Indian Wells (perdió frente al tandilense Juan Martín Del Potro).
Con este resultado, Federer acumula 8.820 puntos, en caso de obtener el torneo totalizará 8.920. Igual, pase lo que pase, nadie le quitará el número 1.
Además, para el de Basilea, que se salteó la gira sobre polvo de ladrillo y volvió al circuito en Stuttgart luego de casi tres meses de ausencia, se tratará de la final 148 de su carrera, en la que lleva 97 títulos y 50 caídas. Con el de ayer Federer en el certamen alemán sumó 1.151 victorias.
Stuttgart era la última oportunidad, dentro de la campaña sobre hierba, de recuperar el número uno en el escalafón mundial, ya que en Halle, también en Alemania, y Wimbledon no podrá sumar puntos, puesto que el año pasado ganó los dos torneos.