Será final en rojo y blanco para la edición 2020 de la Copa de Campeones. San Martín de Cañada Honda e Instituto La Laja de Albardón, que comparten colores, le darán nombre al campeón este domingo luego de ganar las semifinales. Los sarmientinos vencieron 3-1 a Juventud Ullunera y los albardoneros derrotaron por 1-0 a Villa Ibáñez. Será campeón inédito para el torneo porque los dos finalistas nunca habían ganado antes el certamen. En el primer turno de la serie semifinal, San Martín de Cañada Honda, conducido por su goleador Federico Salinas, certificó su pase a la final con un contundente triunfo por 3-1 sobre Juventud Ullunera. El León sarmientino fue práctico y sumamente efectivo para encarrilar su clasificación. A los 2" de juego, ya estaba arriba en el marcador con la primera aparición de Salinas en el arco y después pudo manejar, con esa ventaja, los tiempos del partido. Juventud Ullunera mostró la calidad de Héctor Pérez para intentar el empate en esa primera parte, pero nunca encontró profundidad. Y claro, San Martín no se lo perdonaría porque en el cierre del primer tiempo, otra vez Salinas apareció para poner el 2-0 parcial que parecía clasificación. En el complemento, Juventud quemó todo en los primeros 20" de juego y encontró la esperanza en el descuento de Cristian Pérez cuando iban 11". Parecía que podría llegar el milagro pero se repitió, se hizo inofensivo y de contra, lo sufriría. San Martín perdonó un par de veces, pero en un córner Gabriel Algañaraz puso de cabeza el 3-1 para certificar su pase al partido más importante del año y de su historia para el modesto San Martín, el León del oeste sarmientino.
Este domingo jugarán por el tercer puesto y luego, la finalísima a las 21.
En el cierre de la jornada, en el Bicentenario, Villa Ibáñez de Ullum e Instituto La Laja le dieron forma a una final anticipada. Pareja, intensa. Bien jugada y definida recién en tiempo de descuento con un penal agónico que convirtió Maxi Herrera. Los ulluneros fueron más prácticos en el primer tiempo y desperdiciaron no menos de tres chances de gol netas. Leo Avila, el arquero albardonero, fue clave para eso también pero esas tres jugadas mano a mano pintaron el desarrollo del partido en los primeros 45". La Laja tuvo el control de la pelota, buena circulación pero nunca llegó con peligro. Villa Ibañez, en cambio, tuvo mucho menos la pelota, esperó más pero con la velocidad de sus puntas, Gabriel Muñoz y Nahuel Jofré, le complicó la vida a los albardoneros. Terminaron sin goles esa primera parte, con promesa de mejor juego para el complemento. Otra vez, Villa Ibáñez perdonó en un par de manos a manos en el mismo comienzo del segundo tiempo y Ávila sostuvo el cero en el arco de La Laja. Se soltaron algo más las marcas y Franovich arrimó peligro con un tiro de esquina cerrado. Rotten tendría en sus pies la más clara de Instituto pero no pudo definir contra Cortez. Luego, Juan Ruiz probó al arquero ullunero y fue excelente su respuesta. Parecía que todo se encaminaba a la definición por penales pero Omar Benavídez guapeó la última pelota de la noche y obligó al foul de Pérez. Penal en el minuto 91, que Herrera cambió por gol de clasificación.