En plena pretemporada, en Sportivo ya pasó la etapa donde todos concentraron y hubo convivencia. Ayer se inició otra, donde si bien para el técnico Darío Tempesta es la continuidad de la anterior, ya no están bajo un mismo techo, pero "estamos haciendo la base", dijo mientras el grupo trotaba por el camping de ATE. En tanto que recién el sábado, cuando haga la primera práctica de fútbol, se pondrá en marcha la última etapa que consiste en afinar la estructura y encontrar el juego que el DT piensa y que los jugadores deben plasmar.
Paso a paso, así es la vida de Desamparados en esta pretemporada. Todo en su momento y a su justa medida. Como piensa y analiza las cosas su entrenador. Quien busca en esta parte, además de poner a todo el plantel a la par en lo físico, "que haya respeto entre los jugadores y que defiendan su trabajo en una sana competencia".
Por el momento el balance de Tempesta es "bueno", porque los jugadores se acoplaron bien al trabajo y "están respondiendo a lo que se les exige". Salvo el defensor Ariel Barth y el arquero Mauro Astrada, quienes tuvieron problemas como fue una contractura y un esguince en el caso del primero, el resto está equiparado y los dos jugadores en cuestión harán un trabajo extra para ponerse a la par del resto.
Sobre la parte futbolística que tendrá su primera función el sábado, Tempesta comenzará a trabajar allí en la estructura y lo que pretende. Es difícil que se sume algún otro jugador más allá de lo que vea cuando el fútbol esté de manifiesto. "Lo único puede ser un delantero, pero no creo. Mi idea es trabajar con un equipo corto donde haya una sana competencia", agregó.
El técnico está muy conforme con el plantel porque se trajo jugadores con nombre y apellido, como él los definió, que en la previa tiene una ventaja, pero cuando "no mantengan el nivel o no defiendan su trabajo, los de atrás tendrán todas las chances", advirtió Tempesta.