Cuando parecía ir muy bien la salud del joven rugbier del Jockey que sufrió un ACV y tuvo una recuperación rápida y milagrosa, surgió un contratiempo que lo tiene por estas horas internado en terapia intensiva en coma farmacológico, confirmó a este diario Marcelo Cabaña, papá de Tomás.

 

El chico de 14 años había recibido el alta el pasado 13 de enero luego de estar una semana internado y en grave estado. Sin embargo, hace unos días un fuerte dolor de cabeza obligó a hacerle nuevos estudios donde se comprobó que tenía un infección. Tras cartón, los médicos le realizaron una punción para saber el detalle del cuadro.

 

Su caso movilizó a muchas personas del ambiente del rugby que expresaron en las redes sociales su acompañamiento a la familia. Mucha gente se unió en oración

 

Intertanto, quedó en terapia intensiva y sedado completamente. Tanto su familia como los médicos confían en la recuperación de Tomás, o ‘Tomi’, como lo llaman sus amigos

 

Detalles del caso  

 

El chico llegó a su casa el sábado 7 de enero con un dolor de cabeza, nada anormal hasta ahí, por lo que tomó un analgésico. En el despertar del día posterior no había cambios: seguía la migraña y se agregaron los vómitos.

 

Ahí los padres de Tomás decidieron llevarlo al médico y apenas ingresó a la guardia del Cymin la decisión fue pedir una tomografía urgente. “Pensábamos que era algo que le había caído mal. Pero los médicos advirtieron ahí nomas la gravedad, Tomás había perdido el conocimiento, no sabía cómo se llamaba. Por ser domingo fue difícil conseguir un técnico para hacer una tomografía urgente, hasta que la conseguimos en El Castaño”, relató en su momento Marcelo.

 

Luego, Tomás pasó directo a la terapia intensiva del Cymin, a las 14 del domingo último. El día lunes deciden ubicarlo en terapia intermedia, lo ve una neuróloga, le realiza unas pruebas motrices y resuelve darle el alta. “Me niego a que le den el alta porque hasta ahí no se sabía lo que tenía, no había diagnóstico. Que todo era por el estrés y la pérdida de conocimiento era casual, me dijo. Con el alta firmada, me negué y le dije que no me lo iba a llevar”, detalló el padre.

 

Un día más tarde, el martes, la doctora Pardini, jefa de Pediatría del Cymin, decide ponerse de cabeza con el caso para determinar qué es lo que tenía el chico. “Al otro día detectan que era un ACV (Accidente Cerebro Vascular), que se ve en la resonancia magnética”, explicó.

 
Tomás había perdido mucha sangre y esa presión lo llevaba a tener ese cuadro insoportable de dolor de cabeza y problemas en la visión en uno de sus ojos. El jueves lo operaron, intervención que resultó exitosa y este sábado el rugbier del Jockey fue mandado a su casa con cuidados especiales, pero en franca recuperación.