Diego Schwartzman perdió ayer con el número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, por 7-5 y 6-4 en la final del Masters 1000 de tenis de Roma, jugada en el court central del Foro Itálico.
Schwartzman intentó siempre frente a un concentrado Djokovic que entendió de antemano que ante el mínimo desliz podía pagarlo caro porque su rival nunca se da por vencido.
El "Peque" jugó de igual a igual en el primer set con la chance de dos quiebres que no aprovechó. Djokovic sacó la ventaja necesaria en los puntos decisivos para adueñarse del set.
"Nole" mantuvo su producción para el segundo set y no otorgó chances ante un Schwartzman más errático, quien acumulaba cansancio luego de sus victorias brillantes: una histórica ante el español Rafael Nadal, el rey del polvo de ladrillo, en cuartos y otra de mayor esfuerzo ante el canadiense Denis Shapovalov, en semifinales.
El "Peque" subirá dos lugares en el ranking. Quedará 13 a dos posiciones del 11 que tuvo en 2018. Además, al ser segundo en el torneo embolsará 177,676 dólares, mucho menos de los 574.438 que se llevó Djokovic, el año pasado, cuando al perdió con Nadal.