Takuma Sato (foto) logró controlar el embate de Helio Castroneves y se convirtió ayer en el primer piloto japonés en ganar las 500 Millas de Indianápolis, mientras que la aventura de Fernando Alonso en la IndyCar terminó con un abandono.
Sato, que inició la carrera con apenas una carrera ganada en la IndyCar, se quedó con el triunfo en la prueba más emblemática.