Buenos Aires, Télam
Vélez Sarsfield, con gol de Maximiliano Moralez a los 38 minutos del segundo tiempo, se consagró ayer campeón del torneo Clausura al vencer, de local, a Huracán por 1 a 0, en un partido por la 19na. y última fecha.
Gabriel Brazenas fue el árbitro, quien expulsó a Moralez por doble amonestación luego que éste se quitara la camiseta tras su conquista. Además el arquero de Huracán Gastón Monzón, le contuvo un tiro penal a Hernán Rodrigo López en la primera mitad.
El Globo comenzó mejor, y a los 9′, Brazenas le anuló un gol de cabeza legítimo a Eduardo Domínguez (ex Vélez) al sancionar una inexistente posición adelantada.
Sin embargo, el equipo de Angel Cappa asimiló el impacto y con el criterio de Mario Bolatti en el manejo de los tiempos y la pelota y algunas apariciones de Patricio Toranzo, Javier Pastore y Matías Defederico fue un poco más incisivo.
Pero ese buen pasaje futbolístico de Huracán se interrumpió a los 19′, por una fuerte tormenta con granizo, que coincidió con la caída de un hincha de Vélez al foso.
Brazenas, acertadamente, decidió suspender el partido para preservar la integridad física de los futbolistas. Y lo reanudó una vez que paró la tormenta y la gente de Vélez dejó la cancha en condiciones, tras 28 minutos de suspensión.
Huracán, tras el parate, continuó con el control del partido, pero sin llegar al arco rival. Vélez, con el transcurrir de los minutos, mejoró en todas sus líneas, le robó la pelota a su adversario y le generó peligro al arco de Monzón.
La defensa ajustó las piezas: Víctor Zapata y Franco Razzotti anularon a Bolatti, al tiempo que Moralez, el generador de fútbol, entró más en juego y la dupla de ataque López-Martínez empezó a crear situaciones.
A los 24′, Martínez, de contraataque, encaró por la derecha y Carlos Araujo le cometió penal. El uruguayo López lo ejecutó, pero Monzón lo contuvo.
Cinco minutos después, una jugada por la derecha de Moralez no pudo ser resuelta por el goleador uruguayo velezano. Lo bueno del local en ataque coincidió con una serie de fallas en defensa de Huracán.
Pero el equipo de Cappa reaccionó en los minutos finales y contó con dos chances clarísimas para irse en ventaja en el marcador.
A los 41, un cabezazo de Domínguez se estrelló en el travesaño y Federico Nieto no pudo capitalizar el rebote, y a los 44′, un remate de Defederico que se fue muy cerca del palo izquierdo.
El segundo tiempo fue muy equilibrado: Huracán se retrasó unos metros para no dar espacios y Vélez no encontró la forma de llegarle a Monzón. Pero los 10′ finales del partido tuvieron de todo y a Brazenas como principal responsable del resultado.
A los 35′, el árbitro no sancionó un penal de Arano a Cubero y tampoco expulsó a ninguno de los dos jugadores y a los 38′, llegó el gol de Moralez, pese a la falta de Larrivey sobre Monzón.
El final, con 13′ de descuento incluidos, tuvo tres jugadas clave: dos mano a mano de Larrivey que tapó Monzón y un cabezazo de Defederico que desvió Cubero casi sobre la línea.
Después hubo manotazos, forcejeos, agresiones y casi una pelea generalizada donde Domínguez salió con la ceja cortada. Brazenas no intervino. Así Vélez gritó campeón después de 4 años y Huracán sumó una nueva frustración.