Dos exdirigentes de la Federación Internacional de Halterofilia (IWF), el húngaro Tamas Ajan y el rumano Nicu Vlad, fueron suspendidos de por vida debido a su papel en el ocultamiento del dopaje, anunció ayer el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS).
La halterofilia sigue bajo estrecha vigilancia del Comité Olímpico Internacional y su permanencia en el programa de los Juegos-2024 de París no está garantizada. La disciplina representa más de la cuarta parte de los casos de dopaje de la historia olímpica. Los casos de Ajan, que presidió la IWF durante 20 años antes de renunciar en 2020, y de Vlad, exvice de la organización, habían sido llevados al TAS en diciembre de 2021 por la Agencia Internacional de Controles.