Buenos Aires, 31 de octubre.- Un espectador saltó al campo durante el Petrolul Ploiesti-Steaua de la Primera División rumana y derribó de un puñetazo en la cabeza al jugador del Steaua George Galamaz, quien abandonó el terreno de juego aturdido y tuvo que ser trasladado al hospital por una posible fractura del pómulo.
El incidente se produjo en la primera parte con 0-1 en el marcador, cuando el Steaua se disponía a patear un penal que podía sellar su victoria. Un espectador saltó entonces al terreno de juego, corrió hasta el centro del campo y derribó de un golpe certero a Galamaz.
El espontáneo siguió corriendo hacia el arco del Petrolul, hasta que el jugador serbio del Steaua Novak Martinovic lo tiró al suelo de una espectacular patada. El propio Martinovic y el arquero visitante Razvan Stanca golpearon de nuevo al agresor caído, que fue retirado del campo por los agentes de seguridad del estadio.
Para sorpresa de todos, el árbitro no suspendió el partido y expulsó con roja directa a Martinovic y Stanca. Mihai Costea marcó de penal el segundo del Steaua. Antes de que el Petrolul reanudara el encuentro desde la mitad de la cancha, un petardo lanzado desde la tribuna impactó en la espalda del recién ingresado portero del Steaua, Ciprian Tatarusanu.
Tatarusanu quedó tendido en su área algunos minutos, hasta que el árbitro decretó la interrupción del partido. El referí y los capitanes de los dos equipos decidieron poco después la suspensión del encuentro. Según la prensa local, la Policía arrestó a cuatro seguidores del Petrolul en relación con el lanzamiento del petardo.