De oro. Los chicos de la Selección sanjuanina de vóleibol volvieron a escribir otra página dorada en los Juegos Binacionales. La cantera provincial en esta disciplina sigue generando talentos. Ayer los chicos le ganaron a Córdoba la final en La Superiora y obtuvieron el certamen en forma invicta.

 

Lo dijeron los protagonistas, los propios y los visitantes. Si hasta el entrenador de la Selección Argentina de Básquetbol, Sergio Hernández, pasó por la provincia y aplaudió lo que pasaba con esos 1.744 deportistas de San Juan, Mendoza, Córdoba, San Luis, Metropolitana, Maule, O"Higgins y Valparaíso. Los XXII Juegos Binacionales de Integración Andina que empezaron el domingo pasado ayer llegaron a su fin y San Juan descansará con la sensación del deber cumplido: la competencia semanal salió perfecta, se disputó en grandes escenarios, tres de los cuales hasta fueron estrenados con los Binacionales, y los representantes sanjuaninos brillaron por su performance.

Este año no hubo medallero, lo que no quitó talento en las competencias. Y en ese aspecto, la delegación sanjuanina conformada por 218 personas logró una gran cosecha.

A lo largo de los cinco días de acción y en 11 disciplinas, los chicos sanjuaninos sumaron 31 medallas, de las cuales 12 fueron doradas. En atletismo, en la flamante pista sintética Jesús Morales, el equipo anfitrión sumó seis preseas y el dato saliente fue que dos fueron de oro en los 5.000 metros llanos y en ambas ramas, histórico para San Juan en las 22 ediciones. Gaspar Casimiro lo consiguió entre los varones y Aylén Funes lo hizo entre las mujeres.

El ciclismo, con su fuerte impronta en la provincia, fue la disciplina que más medallas aportó: 11 entre la pista y la ruta. Y quizás lo más importante fue el hecho de ver figuras en proyección, como Rodrigo Díaz en la pista, con un total de cuatro preseas (oro en velocidad por equipos), o de Magalí Balmaceda, quien cosechó cuatro preseas y lo hizo tanto en pista como en ruta, de hecho es la flamante ganadora en la gran fondo. También fue destacado lo de Abril Capdevila, con podios en el velódromo y en ruta.

La natación fue otra de las disciplinas que sobresalió. Hubo nueve medallas y nadadores que ya son referentes en la disciplina. Rosa Mulet cerró una gran actuación con cinco medallas, dos de las cuales fueron de oro (500 y 100 metros pecho), mientras que Enzo Greco (oro en 400 metros libre) y Román De la Rosa fueron los otros nadadores que brillaron en el natatorio de Ausonia.

En los deportes en conjunto, San Juan ratificó su dominio en el vóleibol. Los varones le ganaron a otro de los candidatos, Córdoba, y mantuvieron el prestigio que el vóley provincial se ganó a lo largo de las diferentes ediciones de los Juegos Binacionales, con talentos que vistieron la camiseta de San Juan y que luego lo hicieron hasta con la de Argentina.

El básquetbol no se quedó atrás y los chicos subieron a lo más alto del podio tras un torneo impecable y ganar la final ante Córdoba. Fue la primera medalla dorada en la disciplina y mostró el gran presente (y promisorio futuro) que tiene el básquet en la provincia.

El balonmano también evidenció crecimiento y las damas obtuvieron la medalla de bronce; a la vez que el hockey sobre patines, que hizo su presentación en estos Juegos Binacionales, no defraudó y sumó las dos medallas de oro, tanto entre las chicas como en los varones. Con un rendimiento sólido y contundente a lo largo de la competencia, los dos seleccionados confirmaron que la disciplina es potencia en esta parte del país.

 

Impecable. Los atletas tuvieron a disposición en el CEF Nro 20 la primera pista sintética de atletismo de San Juan, que fue inaugurada justamente para estos
Binacionales.
Emociones. El natatorio de Ausonia ofreció grandes emociones y hasta un récord argentino. Grandes talentos y futuras figuras de la disciplina se lucieron en el agua.

Escenarios
18

Escenarios deportivos fueron dispuestos para el desarrollo de las 11 disciplinas que tuvieron los Juegos Binacionales. Todos fueron de primer nivel e impecablemente presentados.

Alimentación
2.300

Personas pasaron, cada día, por el comedor de los Binacionales, dispuesto en Cepas Argentinas. Además de almuerzo y cena, allí disponían de las meriendas y mediatarde para cada uno.