Solo en el medio de la multitud, con sus ex compañeros observándolo, Juan Román Riquelme, de flamantes 45 años pues los cumplió el sábado, dijo en su despedida del fútbol: "Esto es mucho para mi. Sin ustedes no podría vivir".
En el llamado "un partido para toda la vida", el último 10 se despidió, con la pelota y los cortos, de sus "bosteros".
Ante 55 mil hinchas que no olvidarán este 25 de junio, justo a 45 años del primer campeonato del mundo de Argentina, después de 9 años de abandonar la actividad, se dio el gusto del último picado en el patio de su casa con un tal Messi de invitado de lujo.
En sus palabras finales al término del encuentro, vistiendo la camiseta con el número 10 y el nombre de Maradona sobre el dorsal, en una suerte de devolución de gentilezas porque Diego se había despedido luciendo la de "Román" en 2001, no se olvidó de sus comienzos " Le agradezco a José (Pekerman) por todo lo que me enseñó de chico".
Y de sus técnicos preferidos, Alfio "Coco" Basile y el "Virrey" Carlos Bianchi: "Este señor de gorra y barba me enseñó de fútbol y de la vida, y Carlos fue el culpable que nos acostumbró a ganar siempre".
En el comienzo de la fiesta cuando asomó su cuerpo por el túnel del centro de la cancha, el relator cordobés Matias Barzola, a pedido del homenajeado, lo recibió con palabras como "te pusiste la de Boca y nunca te sacaste la de Boca, te peleaste contra el poder. Te criaste en el barro y el poder no te pudo comprar". Y no mintió para nada, Román fue siempre un "descarado", con y sin la pelota.
Apenas saludo al arco que da casa Amarilla se desplegó el telón nuevo que decía: "Nací bostero gracias a mi papá y me voy a morir bostero como todo ustedes".
"En este sitio jugó Juan Román Riquelme" decía una alfombra plástica al costado del campo de juego de la Bombonera, al lado estaban ubicados al lado de los once trofeos que consiguió el ídolo con la camiseta azul y oro.
Y en el medio hubo un partido de fútbol que los de Boca con Román le ganaron 5 a 2, a los de la selección con Lionel Messi, a quien calificó junto a Maradona "en los dos mejores jugadores" que vio en su vida.
Del lado de Boca estuvieron las estrellas de la época dorada del virrey y otros amigos de Román que jugaron en los ’90. Con la camiseta del campeón del mundo se alinearon, entre otros, Lionel Scaloni, Pablo Aimar, Messi, Javier Saviola y Ángel Di María. En el final se dio el gusto de entrar Agustín, uno de los hijos de Román, quien por su pedido según contó el ídolo alguna vez, se metió en la política del club. "Tuve la suerte de que el 10 de noviembre de 1996 entré en una película, la más linda que le puede pasar a una persona", cerró. Y hoy esa película tuvo el final "feliz" que Román se merecía.
La "12": "Messi nos tenés que perdonar"
La hinchada de Boca brindó ayer una cálida bienvenida al astro argentino Lionel Messi durante la despedida de Riquelme en La Bombonera, pero lo relegó en sus preferencias por debajo del homenajeado, considerado como el mayor ídolo de la institución.
"Messi, Messi, Messi, Messi, nos tenés que perdonar, en La Boca el más grande, el más grande es Román", fue el cántico que bajó de la bandeja que ocupa "La 12" y contagió a toda la cancha antes del partido.
El campeón mundial en Qatar 2022 tuvo una presentación especial antes del partido y recibió una ovación al igual que los también campeones mundiales Leandro Paredes, Ángel Di María y el DT Lionel Scaloni.
Por otro lado, el público de Boca destinó aplausos para Pablo Aimar y suaves silbidos para Javier Saviola, dos de las figuras identificadas con River que participaron de la despedida.
Los futbolistas del seleccionado argentino y los de Boca fueron mencionados de forma intercalada mientras el estadio estaba a media luz y se esperaba por la aparición del homenajeado. La única figura que recibió una leve reprobación de la hinchada fue el "Conejito" Saviola, delantero que sólo vistió la camiseta de River en el fútbol argentino y que compartió con Román una etapa en el seleccionado argentino y en Barcelona de España.
Otros jugadores con pasado en River como Diego Placente, Esteban Cambiasso, Juan Pablo Sorín y Luis "Lucho" González también fueron bien recibidos por el pueblo "xeneize", que no los silbó.
OVACIÓN A CARLOS BIANCHI
La Bombonera volvió a cantar por el "Virrey"
Carlos Bianchi, el técnico más ganador en la historia de Boca, era uno de lo más esperado por el hincha, en la despedida de Juan Román Riquelme, y cuando se anunció por la voz del estadio su presencia y asomó su cabeza calva, la multitud hizo retumbar el cemento del templo "xeneize".
Y entonces sonó el viejo canto, como en aquellas históricas jornadas de Copa Libertadores de principios de 2000: "Que de la mano, de Carlos Bianchi, todos la vuelta vamos a dar".
El ex entrenador de 74 años, que tiene su merecida estatua en el hall de la fama "xeneize", movió sus manos en agradecimiento. La última vez que el "Virrey" había pisado la Bombonera fue el 8 de julio de 2015 en la despedida de Sebastián Battaglia otro "gladiador de su época de oro"
El 24 de agosto de 2014 fue la última como técnico "xeneize" en el Alberto J. Armando y sufrió la caída ante Godoy Cruz por 3 a 0.
Tres días después dejaba el club tras la derrota en la Plata ante Estudiantes.
Según Román declaró en la conferencia de prensa, es "el culpable de todo. Nos acostumbró mal y el hincha pensó que era fácil ganarla Copa".