Racing Club, con un gol de Javier Cámpora sobre el final del partido, venció anoche a Estudiantes, que lleva 117 días sin triunfos, por 1 a 0, en La Plata, y despertó aún más el descontento de los hinchas Pinchas. Con el triunfo, Racing llegó a 11 unidades, mientras que Estudiantes se quedó con 3 y cierra la tabla junto a San Martín, aunque éste jugará hoy ante Godoy Cruz.
Los 45 minutos iniciales dejaron en claro las serias dificultades que tienen ambos equipos para generar fútbol.
Diego Cagna, por un lado, y Luis Zubeldía, por el otro, emplearon sistemas distintos, pero coincidieron en algo: plagaron la mitad de la cancha de volantes con más voluntad de lucha que de juego.
Entonces hubo mucha marca y fricción, poco juego y casi ninguna chance de gol.
A Estudiantes, que salió a la cancha con un 3-5-2, le costó mucho llegar al arco de Sebastián Saja. Es que no hubo nexo entre los mediocampistas y los delanteros.
Racing, por su parte, lo hizo con un 3-4-2-1, pero tuvo el mismo déficit que su rival. Así, Agustín Silva fue otro espectador de lujo.
El segundo tiempo, al menos en el comienzo, tuvo otra dinámica, ya que los dos equipos se mostraron más ofensivos.
Racing tuvo la mejor chance de gol del partido, a los 2 minutos, en la cabeza de Mario Bolatti, pero Silva respondió de manera fantástica.
Estudiantes, en tanto, respondió con un frentazo de Duvan Zapata (24m.) y un remate de Leonardo Jara (25m.), pero en ambas oportunidades estuvo brillante Saja.
El equipo platense después (31m.) llegó con otro cabezazo, esta vez de Leandro Desábato, que pasó muy cerca del travesaño.
Los últimos minutos fueron malos, pero apareció Cámpora (ingresó por Mauro Camoranesi) y puso el 1 a 0 final, a los 42 minutos, tras aprovechar un rebote en el área. Un resultado injusto, pero el fútbol poco entiende de estas cosas.