Racing consolidó ayer su aspiración de acceder a la edición 2011 de la Copa Libertadores al obtener un triunfo sobre Banfield por 2 a 1, en condición de visitante, en la 16ta. fecha del torneo Apertura. Gabriel Hauche y Claudio Bieler convirtieron los goles de Racing, mientras que Marcelo Carrusca anotó para Banfield, todos en el primer tiempo. Racing sumó 54 puntos en la tabla de la Copa (clasifican los campeones del Clausura y Apertura y los tres mejores del 2010) y se ubicó en el quinto lugar, pero su aspiración está sujeta al desempeño de Independiente en la Copa Sudamericana, pues de ganar el torneo, el "Rojo" se asegurará una plaza.
El elenco de Avellaneda exhibió un buen funcionamiento colectivo en el primer tiempo y un tridente interesante conformado por Patricio Toranzo, José Luis Fernández y Giovanni Moreno. Racing movió la pelota con prolijidad y tuvo capacidad de desequilibrio en ofensiva. Banfield se encontró superado por la forlateza del funcionamiento rival pero, en acciones individuales, también generó acciones de riesgo. El partido tuvo cierta intensidad y el espectáculo ganó con la rápida apertura del marcador, a los 21m, obra de una definición certera de Gabriel Hauche. Banfield tuvo capacidad de respuesta y consiguió la igualdad a los 24m. con una buena maniobra combinada entre Rubén Ramírez y Marcelo Carrusca que coronó el mediocampista. El dominio de Racing no se alteró por los vaivenes del marcador que, de todos modos, volvió a inclinarse en su favor cuando a los 25m. Claudio Bieler capitalizó una desinteligencia en la defensa de Banfield.
El equipo de Avellaneda ratificó su dominio en el trámite inicial del segundo tiempo, aunque en el marco de un partido más friccionado, áspero y violento. A los 17m, Rubén Ramírez cayó en el área luego chocar con el arquero Jorge De Olivera, pero el árbitro Néstor Pitana no advirtió la falta que reclamaron los jugadores de Banfield. Banfield, con actitud y cierto desorden, de a poco se adueñó de la pelota y buscó con insistencia el arco rival en los minutos finales. Fueron argumentos insuficientes para Banfield, que no revertió la victoria que Racing había forjado con solvencia con su mejor fútbol en el primer tiempo.