La Audiencia Nacional confirmó los procesamientos del jugador Neymar y del Barcelona -como persona jurídica- por corrupción en su fichaje, cuando jugaba en el Santos de Brasil en 2011, por lo que irán a juicio.
Además de estos dos procesamientos, la sección cuarta de lo Penal ha ratificado los de la madre del jugador, Nadine Gonçalves, la empresa familiar N&N y el Santos, procesados todos ellos junto al presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, y su antecesor, Sandro Rosell, cuyos recursos están pendientes de ser resueltos.
Posteriormente, la Fiscalía hizo su petición de penas: 2 años de cárcel y 10 millones de euros de multa para el jugador, 5 años para el expresidente del Barça Sandro Rosell, 2 años de cárcel para el padre de Neymar y un año para su madre.
El fiscal de la Audiencia Nacional José Perals pidió el archivo de la causa para el presidente del Barcelona, Josep María Bartomeu, si bien DIS le pide 5 años, y reclama asimismo 8,4 millones de euros de multa para el Barcelona y 7 millones para el Santos.
También solicita una multa de 1,4 millones de euros para la empresa familiar N&N, además de reclamar a cada uno la misma multa de 10 millones de euros que el fiscal ha pedido para el jugador.
Además, reclama a los acusados Rosell y Odilio Rodigues, exvicepresidente del Santos; así como al Santos y al Barcelona, como personas jurídicas, que indemnicen de forma conjunta a DIS con 3,2 millones de euros en concepto de responsabilidad civil.
La principal alegación del jugador es que el se ha mantenido al margen de los negocios y tanto desde su minoría de edad hasta alcanzada la mayoría "se ha venido dedicando exclusivamente a jugar al fútbol, depositando su absoluta confianza, ciega, en su padre, para cualquier aspecto distinto".
Los magistrados han observado que este argumento es similar al utilizado por Lionel Messi, su compañero, en otro procedimiento distinto. Finalmente, fue juzgado y condenado a 21 meses de cárcel y 2 millones de euros por delito fiscal. Destacan además que los argumentos esgrimidos por Neymar deberán exponerse en todo en el juicio desde el momento en que en el recurso no se discute "la firma estampada en nombre propio por el jugador en los contratos" investigados.
Barcelona, por su parte, pidió el archivo de las actuaciones que a él le afectan al considerar que de lo investigado "no se demuestra la existencia de un hecho delictivo" propio del club ni delitos imputables a una persona jurídica, alegación que la Sala tampoco acoge.