Lionel Messi es hoy la principal duda para la visita de la Argentina ante Perú, el martes en Lima, por la cuarta fecha de las Eliminatorias Sudamericanas de fútbol rumbo al Mundial 2026.
El capitán y máxima figura del seleccionado campeón del mundo estuvo alrededor de 40 minutos en la victoria sobre Paraguay y se lo notó falto de explosión, algo normal ya con sus 36 años e inactividad reciente desde la lesión muscular que sufrió ante Ecuador en la primera fecha.
Es que Messi apenas llegó al partido con un puñado de minutos en Inter Miami y lógicamente Scaloni lo cuidó contra Paraguay, ya que lo mandó a la cancha cuando iban 7′ del segundo tiempo por Julián Álvarez, rompiendo el doble nueve con Lautaro Martínez, que había elegido el técnico desde el inicio. A Messi le costó la conexión con Lautaro Martínez, quien viene claramente peleado con el gol en la Selección.
Scaloni evaluará el potencial cambio de esquema si es que Messi, al que se lo notó cómodo en las descargas y definiciones de pelota parada más que en movimiento, sale de titular en Lima o mantendría los mismos nombres y disposición táctica de darse que el rosarino comienza nuevamente desde el banco de suplentes.
Es que si bien el 4-3-3 es el sistema predilecto por el entrenador, no es lo mismo si los partícipes que le ponen nombre son Messi junto con Julián Álvarez y Ángel Di María como con Ecuador o aparecen Lautaro Martínez con Álvarez y Nicolás González. De hecho, en el primer tiempo se notaron los movimientos Julián Álvarez por afuera, con diagonales constantes y una circulación insoportable para la defensa rival por todo el frente de ataque.
Esto se develará con el correr de los entrenamientos, debido que ayer se entrenaron de manera regenerativa todos aquellos que tuvieron actividad en la victoria sobre Paraguay. El resto, salvo alguna lesión o sobrecarga, Scaloni repetirá los mismos nombres en cada línea de la cancha porque el funcionamiento del mediocampo rozó la perfección con una presión asfixiante en las pérdidas de pelota y un tratamiento de alto nivel en los pies de De Paul, Enzo Fernández y Mac Allister.
Perú no viene bien y necesita recuperarse
El próximo rival, el alicaído Perú, está muy lejos de las mieles del ciclo dado en las últimas dos Eliminatorias con Ricardo Gareca. En la actualidad se ubica penúltimo en las posiciones con apenas un punto y sin goles a favor en el camino a un Mundial donde se clasificarán seis seleccionados y un séptimo irá a un repechaje.
El enojo de los medios peruanos y los hinchas locales radica ahí, al ver a Perú afuera de esas posiciones junto con Bolivia y Paraguay en el amanecer de la competencia.
Los conducidos ahora por Juan Reynoso evaluarán si llegará Carlos Zambrano, quien salió con una pequeña lesión en la derrota ante Chile y fue reemplazado por Ánderson Santamaría cuando iban 22 minutos del segundo tiempo.
Perú se caracterizó en los tres primeros partidos por la poca posesión e intento de localización del legendario Paolo Guerrero, de paso improductivo por Racing, pero renovado y con buen presente en Liga de Quito. El experimentado atacante, de 39 años, en muchas ocasiones queda demasiado aislado y necesitará de una mejor versión colectiva que lo alimente en la zona de definición, donde es letal.