Un presidente acorralado, un técnico más que cuestionado, una crisis interna que se desató furiosamente y un clima más que caldeado han puesto a Sportivo Peñarol al borde del incendio total. Y es que la crisis que se había iniciado en La Pampa cuando, además de perder por goleada ante Ferro, se dio una pelea entre el técnico Cristian Bove y el encargado de prensa Luis Varela nunca paró. El intento de sofocarla fue propiedad exclusiva del presidente Oscar Cuevas quien el lunes, ya en San Juan, presidió una tensa reunión de comisión directiva que tenía como punto principal la salida de Bove de la dirección técnica. Hubo votación, la moción de desplazarlo era casi unánime, pero el presidente bohemio decidió redoblar la apuesta y apuntaló la continuidad del técnico hasta el final del Federal A. Esa decisión fracturó definitivamente todo el ambiente interno de Peñarol y en la comisión ya no hubo vuelta atrás.

De la lista inicial de 17 miembros que fueron electos junto a Cuevas, hoy sólo 12 son los que participan y ese grupo decidió convocar a una reunión extraordinaria para exigir la renuncia de Cuevas y por consiguiente, la salida de Bove. Al cierre de esta edición, en la calle Tucumán se decidía el futuro inmediato del Bohemio desde lo institucional y lo deportivo porque los hoy opositores al presidente fueron por la renuncia que en el caso de ser aceptada por Cuevas pondría al vicepresidente segundo, Domingo Villalá, como nuevo titular de Peñarol siguiendo la cadena sucesoria. En el caso de la negativa de Cuevas, todos los integrantes tenían decidido renunciar en forma conjunta dejando un vacío de poder y representación que obligaría a una intervención desde Personería Jurídica. A Cuevas, lo pusieron contra las cuerdas, con poco margen de maniobra para buscar otra salida que no sea la renuncia.

Uno de los integrantes de la actual comisión como Javier Guillén -secretario del club- fue el que motorizó la postura de sus pares. Sus fuertes declaraciones periodísticas en la mañana del miércoles desataron episodios complicados porque según confió él mismo recibió posteriormente amenazas y tuvo que realizar la denuncia correspondiente para preservar su seguridad y la de su familia. En ese clima, anticipó además que desde lo deportivo ya habrían contactado algunas alternativas para asumir al frente del equipo pero que esperaban la resolución del tema Cuevas.

Peñarol tiene fecha libre. El próximo miércoles recibirá a Sol de Mayo en el partido postergado de la fecha 24.

A principios de semana trascendieron algunos nombres para suceder a Bove como Edgardo Herrera y Ariel Agüero pero luego todo quedó en punto muerto. Ahora, con las horas agitadas que vive el Bohemio todo puede ser posible.

Así son los días de este Peñarol que tiene fecha libre en esta jornada de la Zona Sur, pero que necesita volver al triunfo pronto. Está solamente a un punto del descenso y este fin de semana podría quedar en esa zona de riesgo pero apuestan todo a los 6 puntos de los dos partidos en San Juan de la semana próxima.