Mientras muchos ya se imaginan la Vuelta a San Juan 2017 que será UCI, y otros se ilusionan con ver al italiano multicampeón Vincenzo Níbali en las calles sanjuaninas, otro grupo de pequeños chimberos derrocha entusiasmo con cada pedaleada soñando quizás, ser un ídolo dentro de algunos años en el deporte que más atrapa a los sanjuaninos. Se trata de la Escuelita de ciclismo de Chimbas, que bajo el programa de Escuelas de Iniciación Deportiva impulsado por la Secretaría de Deportes, dio comienzo hace más de un mes y ya suma varios entusiastas. El lunes pasado, pocos minutos antes que el viento Zonda comenzara a soplar con intensidad, un pelotón de poco más de una docena de pequeños, giraba por las calles del Barrio "22 de diciembre’, en la zona Norte del departamento chimbero. Allí, todos los lunes y miércoles por las tardes y de manera gratuita, ese pelotón de ilusiones sale a las calles del barrio para brindar un mini espectáculo a los vecinos que se ilusionan con que de allí salga un futuro crack. Emiliano "Bam Bam’ Fernández -vecino de la zona- es el encargado de transmitir los conocimientos que adquirió en los años de trayectoria que lleva arriba de la bici. "Es un una gran alegría poder trabajar con los más chiquitos, lo que más llama la atención es el entusiasmo que le ponen, las ganas, se nota que les gusta mucho hacer esto y eso es fundamental para que tengan continuidad’, contó el ciclista que el viernes último fue subcampeón en el Campeonato Argentino de Pista que se desarrolló en la provincia. 

San Juan es la capital del ciclismo y Chimbas parece ser en cada verano sanjuanino uno de los puntos fuertes de esa pasión. Así lo demuestran los pequeños por el entusiasmo que muestran, muchos de ellos están allí porque ya lo traen de herencia ya que la mayoría viene de familia de ciclistas. Bam Bam valoró el trabajo que realizan los padres de los chiquitos, que en cada entrenamiento cortan las calles que rodean a la plaza homónima al barrio y hasta algunos se animan a agarrar las escobas y barrer las arterias para que ningún chiquito rompa la bici. Y sobre todo por lo que les cuesta conseguirlas. Es que la humildad gana en el pelotón chimbero, y sabiendo el alto costo de los materiales que requiere la bici, los padres armaron una subcomisión donde realizan rifas y todo lo que sea oportuno para recaudar fondos y satisfacer el deseo de los chiquitos de poder competir, en tanto que los cascos fueron aportados por la Secretaria de Deportes, lo que significó un alivio para el bolsillo de los padres. Por las calles chimberas hay chicos con bicis de carrera pero hay otros que todavía no logran adquirir una de esa calidad, pero en la Escuelita no se le cierra las puertas a nadie, por eso se puede ver a pequeños ciclistas en bicis comunes, las llamadas "de paseo’ y hasta en bicicross. 

Por el momento sabiendo el corto tiempo que lleva la Escuelita, Bam Bam cuenta que las clases son de adaptación, sobre todo porque hay chicos principiantes, como Luciano que a sus 4 años se anima a embalar en su pequeña bicicleta. "La idea es que vayan aprendiendo de concentración, equilibrio y dominio de la bici. Eso es lo básico para empezar, después en un futuro queremos hacer una escuelita de futuros talentos para cuando ya hayan avanzado en nivel. Hay que destacar que acá la idea es que los chicos salgan de las calles y hagan deporte’, contó el profe que se ilusiona con que en su escuelita surjan muchos talentos y porque no, en un futuro salga algún ídolo que se robe todos los aplausos en las calles sanjuaninas.

 

Con la bici desde la cuna
 

La gran mayoría de los chicos y chicas que concurren a la Escuelita de Ciclismo de Chimbas de “Bam Bam” Fernández, traen al ciclismo incorporado desde la cuna. Heredado por sus padres o algún familiar. Como el caso del ciclista más pequeño con el que cuenta el pelotón de chiquitos chimberos. Se trata de Luciano Uriel Robledo, que a sus 4 años le contó a su papá que quería ser ciclista. El chiquito heredó la pasión de su tío Gonzalo Robledo, quien corre entre los Libres. "Es increíble como le gusta venir y hacer ciclismo, parece que hubiera nacido para esto”, cuenta orgulloso su papá que lo acompaña cada tarde. Por su parte, Olivia Richeze Fernández es la dama más pequeña del pelotón. Con 5 años asiste a las clases de su tío y padrino y también trae al ciclismo incorporado en el ADN. “Oli”, es hija de Adrián Richeze y Sofía Fernández, hermana de Bam Bam e hija de Ernesto Fernández, DT de la Selección sanjuanina y de Mardan. “Ella venía insistiendo que quería ser ciclista. La madre no está muy de acuerdo porque ya se cansó de tantos ciclistas en la familia”, cuenta Bam Bam. Igual a la chiquita nadie la detiene y con una bici de color rosa hace rodar su pasión en los alrededores de la plaza.
En tanto, Ezequiel Ramos también lo heredó. El chico es el hijo menor de Rubén “Polilla” Ramos, también dupla técnica de Ernesto Fernández, y al igual que sus hermanos Rubén y Duilio, el menor de los Ramos disfruta cada tarde con cada pedaleada. Todos por igual muestran el mismo entusiasmo y no es para menos, se encuentran practicando el deporte que aman.