San Juan, 28 de Marzo.- El presidente de Unión de Villa Krause, Ricardo Torres, se mostró compungido por los disturbios que protagonizó la hinchada de su equipo y terminó con la suspensión del partido ante Quilmes por la Copa Argentina. El dirigente cargó tintas contra el árbitro Andrés Merlos.
“Este personaje vino y empañó la noche. Es repudiable lo que hizo la gente, pero el que caldeó lo ánimos fue el árbitro”, dijo Torres al mismo tiempo que reconoció que futbolísticamente fueron superados por el Cervecero.
Además, aseguró que los daños, aunque todavía no están cuantificados, deberán ser pagados por la institución. “El único perjudicado es el club”, agregó en los micrófonos de radio Colón.
